El viernes 13 de marzo, el Presidente de Brasil, Luis Inacio Lula Da Silva, se entrevistó en Washington con el Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, a quien pidió una aproximación con Cuba, Venezuela y Bolivia.
Con Cuba las causas son evidentes: el bloqueo económico que tanto daño ha hecho y hará a la Isla y cuyos alcances aún no se conocen.
Con Venezuela se ha producido distancia por motivos políticos, precisamente, por el ascendiente en países de América Latina y guiños imprudentes a Rusia.
Bolivia ha dado lucha tenaz por su revolución y su Constitución y en esta lucha ha enfrentado grupos internos que han recibido el apoyo de Estados Unidos a la tenaz lucha contra la pobreza; Bolivia tiene que agregar su defensa hacia el exterior.
Las deterioradas relaciones de estos países daña las que se llevan con los demás, siembran la desconfianza e impiden el libre flujo de las ideas.
Es muy cierto lo que dijo Lula a Obama. Estados Unidos tiene más oportunidad histórica de reconstruir una gran parte de América Latina.
De la entrevista, de la cual el Presidente brasileño salió complacido, el Presidente estadounidense hizo elogios para la política que se lleva a cabo en Brasil.
Ojalá sean buenos presagios para la Cumbre de las Américas que tendrá lugar del 17 al 19 de abril próximo.
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