ATISBOS

Miente una vez más; hizo lo contrario a lo que tanto dijo

Rafael Cienfuegos Calderón

El mandamás del movimiento-partido Morena que dijo no iba a intervenir en la elección del candidato a la presidencia, hizo lo contrario. Definió e impuso las normas que regirán el actuar de las corcholatas y demás apuntados antes y después de la encuesta, y repartió cargos a las corcholatas perdedoras.

El autoproclamado demócrata que mantuvo la narrativa de que iba a permanecer al margen del proceso de elección de su sucesor por ser asunto del partido y decisión de los ciudadanos, mintió. Aunque era difícil creer que siendo el político  protagónico que es se iba a marginar de esa importante contienda de la que depende la continuidad del proyecto ideológico que aspira dejar de legado.

Su estrategia, que trascendió la expuso en la cena del día 5 con las corcholatas, el líder partidista y gobernadores y que el domingo la asumió como resolutivo el Consejo Nacional de Morena, busca la unidad de los aspirantes, que renuncien en la semana que corre, que no haya desbandadas tras la  encuesta del 28 de agosto al 3 de septiembre, y crear la percepción de que no habrá dedazo y que será un proceso democrático.

Para asegurar que eso acontezca se sabe que asignó al segundo lugar de la encuesta la coordinación de los próximos senadores, al tercero la de los diputados y al cuarto un cargo importante en el nuevo gobierno federal morenista.

El presidente del cambio asegura esa chamba a los perdedores para que además de que sigan en la escena política nacional como grupo político unido, apoyen a quien ocupe la presidencia en 2024 con compromiso y unidad desde el Poder Legislativo para hacer los cambios legales que quiere se hagan a la Constitución.

Da muestras irrefutables de que el maneja la agenda y lo hará hasta el último día de su mandato, pero ahora enfrenta la prohibición del Consejo Nacional de que ni él ni gobernadores, líderes de diputados y senadores, alcaldes y consejeros podrán pronunciarse a favor de ningún competidor. ¿La respetará?

Aunque, ya ha hecho mucha promoción para Sheinbaum y eso le ha valido ser puntera en las preferencias.

En la reunión del día 5 el padre de la transformación planteó la renuncia definitiva de los aspirantes para la semana que corre y el Consejo Nacional fijó como límite el día 16. Ebrard ya no es funcionario a partir de ayer, Monreal pidió licencia hoy, Sheinbaum anunció que lo hará el jueves y López dejará la Secretaría de Gobernación el viernes.

Marcó los tiempos para el registro de aspirantes y las campañas, y los consejeros fijaron fecha del 12 al 16 y del 19 de junio al 27 de agosto, pidió que no haya confrontaciones ni debates y así será; propuso que candidatos y dirigencia del partido negocien y definan las casas encuestadoras y lo harán, señaló el 15 de septiembre para tener candidata (o) y eso será el día 6.

Además, se pronunció porque los aspirantes presidenciales eviten difundir sus propuestas en medios informativos críticos de Morena y de la 4T, porque quien gane sea nombrado “Coordinador de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación» y porque los perdedores cierren filas con el elegido.

En respuesta, Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Ricardo Monreal; Manuel Velasco del Partido Verde, y Gerardo Fernández Noroña, del Partido del Trabajo, firmaron el documento de las reglas del proceso de selección y se comprometieron  a aceptar los resultados y a no impugnarlos.