Comunitarias

Milpa Alta y Xochimilco dicen no al Arco Sur

Ricardo Chávez y Silverio Arroyo,
Colaboradores invitados

Las comunidades de Milpa Alta y Xochimilco, dos de las delegaciones rurales que aún quedan en la Ciudad de México, rechazaron, rotundamente, la construcción de la autopista Arco Sur, que promueve la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).

Así lo dejaron ver, en forma clara y contundente, representantes comunales de Santana Tlacotenco, San Jerónimo Miacatlán, San Pedro Oztotepec, San Francisco Tacoxpa y San Pedro Atocpan, de la comunidad de Milpa Alta, y San Francisco Tlanepantla, de Xochimilco, en conferencia de prensa, ofrecida por el diputado federal Avelino Méndez y el representante comunal de San Pedro Actopan, Silverio Arroyo Rojas.

Expusieron que la SCT dio a conocer la construcción de la autopista Arco Sur e incluso inició los trabajos de muestreo de suelo en sus tierras, pero nunca les ha enviado un documento oficial para informarles, mucho menos para consultarles sobre dicho proyecto, como legítimos poseedores de las tierras comunales.

Ante esa nula información oficial, los representantes comunales investigaron sobre la normatividad vigente y concluyeron que el proyecto registra serias anomalías, como son las siguientes:

  • No cumple con lo establecido en el Artículo 2 de la Constitución que obliga a proteger los derechos de los pueblos originarios y consultarlos sobre los proyectos que afecten su territorio.
  • No cumple con el Plan Nacional de Desarrollo, que indica sobre el cuidado de los acuíferos y las cuencas hidrológicas que son fundamentales para cubrir las necesidades básicas de la población.
  • No cumple con el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que obliga al Estado a consultar con los pueblos originarios, con el objeto de obtener su consentimiento previo, libre e informado, para la realización de este tipo de proyectos.
  • Viola flagrantemente lo dispuesto en la Legislación Ambiental del DF, la Ley Ambiental del Programa General de Ordenamiento Ecológico, la Ley de Desarrollo Rural y los Programas de Desarrollo Urbano de las Delegaciones Tlalpan, Alvaro Obregón y Cuajimalpa.

Toda legislación, dijeron, busca proteger y conservar el suelo de conservación, pero, en este caso, la autopista Arco Sur pretende realizarse en suelo que tiene las normas más restrictivas de protección y rescate ecológico y producción rural agroindustrial.

Por todo lo anterior, en consulta hecha en cinco pueblo de la comunidad de Milpa Alta: San Pedro Atocpan, San Pablo Oxtotepec, San Francisco Tecoxpan, San Jerónimo Miacatlán y Santana Tlacotenco, en asambleas plenarias convocadas de acuerdo con el Artículo 23 de la Ley Agraria en vigor, “han dicho y resuelto: No al proyecto de la autopista Arco Sur”, expusieron.

Proteger los bosques del sur capitalino es proteger la vida en todos sus sentidos.

La realización de los trabajos y la conclusión de esta obra afectaría, materialmente, más de 8 mil hectáreas de bosque, impactando el ecosistema y hábitat del conejo teporingo y gorrión serrano, especies en peligro de extinción.

Además, esta zona es determinante para los acuíferos que alimentan en 70 por ciento a la zona hidrológica del DF, en las Delegaciones Milpa Alta, Alvaro Obregón y Magdalena Contreras.

La autopista Arco Sur partiría en dos el área territorial de la comunidad de Milpa Alta, bloqueando la comunicación de los pueblos y la zona de bosques donde realizan sus actividades cotidianas de protección y conservación, así como las tradicionales, llevadas a cabo por las mayordomías, propias de su cultura ancestral: El corte de leña.

Por todas estas consideraciones, los pueblos consultados dijeron no al proyecto para que esta zona boscosa del sur del DF siga siendo un pulmón oxigenante y potencial agropecuario para la megaurbe del Valle de México, situación que destrozaría la realización de la autopista Arco Sur.

Autopista Arco Sur

El proyecto Arco Sur integraría un gran anillo de circunvalación de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México (ZMCM)que, junto con el Arco Norte plantearía transformaciones de fondo en la estructura de desplazamientos viales en esta región, señala la SCT.

Este complejo carretero, que rodeará a la ZMCM, enlazaría a las autopistas México-Puebla, Puebla-Cuautla, Circuito Exterior Mexiquense, México-Cuernavaca, México-Toluca y Chamapa Lechería y complementaría al Arco Norte, evitando que las unidades automotoras crucen por la capital del país.

La obra se calcula tenga una inversión proveniente de la iniciativa privada de 25 mil 200 millones de pesos y una duración de 36 meses. Contaría con un ramal a Atlixco y otro a San Martín Texmelucan, Puebla, de cuatro carriles y con una longitud de 114 kilómetros de desarrollo y tráfico esperado de 8 mil vehículos.

La SCT anunció que en septiembre de 2010 se estaría licitando y para su desarrollo aplicaría un esquema de “concesión individual”. Su construcción debería durar un plazo máximo de 36 meses.

La primera parte, que comprendería 25 kilómetros uniría, mediante seis carriles, el tramo La Venta-Topilejo, con un tránsito diario promedio anual de 30 mil vehículos. El restante tramo Topilejo-Chalco, sería de cuatro carriles con una longitud de 51 kilómetros.

4 Comments

  1. Este proyecto nos afecta a todos y a futuras generaciones, hay que decir «NO AL ARCO SUR». Si alguien tiene información de como oponernos a este proyecto agradeceré mucho pasen la información. gracias.

  2. Este proyecto nos afecta a todos y a futuras generaciones, hay que decir «NO AL ARCO SUR». Si alguien tiene información de como oponernos a este proyecto agradeceré mucho pasen la información. gracias.

  3. Todos debemos oponernos a este proyecto ya que no solo nos afecta a nosotros sino a futuras generaciones.

  4. Todos debemos oponernos a este proyecto ya que no solo nos afecta a nosotros sino a futuras generaciones.