No me refiero esta ocasión a una resaca derivada del exceso de alcohol; sepa usted que el organismo humano también registra de otras formas resacas por el consumo de cigarro y el abuso en la ingesta alimenticia. Y en cualquiera de los tres casos los resultados al organismo aunque temporales van marcando un registro dañino en detrimento de nuestra salud. Si bien muchos nos encontramos frente a ese panorama de la resaca que dejaron las fiestas de fin de año, es momento de tomar al toro por los cuernos y no postergar esos propósitos de año nuevo y aplicarse a la actividad física por lo menos treinta minutos de forma diaria y mantener un régimen alimentico saludable.
Un buen consejo que coadyuvara a darle mayor énfasis a nuestros propósitos es agregar una pizca de mejorana al agua de uso que debe ser por lo ideal dos litros diarios.
Sus propiedades de regulador del sistema digestivo y eliminador de grasa y en especial, esa difícil grasa que gusta de asentarse en la zona abdominal.
Es también tiempo de hacer énfasis sobre las debilidades del mexicano que tiende al consumo excesivo de refrescos y comida chatarra; muy preocupante es hablar de un par de consorcios internacionales que encarnizadamente monopolizan y adquieren la industria nacional y que en la actualidad recurren a métodos tan inmorales como bajos para hacerse presentes en el colectivo. Me refiero en forma particular a Coca Cola, que se proyecta como una compañía comprometida a las causas sociales sin voltear al daño masivo que hace en las generaciones más jóvenes y vulnerables de mexicanos; ¿se percató que tanto en las olimpiadas como en la temporada navideña las estaciones de radio sucumbieron a la transmisión de melodías con fondos ocultos de la musicalización de Coca Cola? En México se ha librado por mucho tiempo una encarnizada pelea por el mercado entre ambas compañías. Y a pesar del inminente daño a la salud de los mexicanos, Coca Cola sigue creciendo en números y utilidades año con año y prepara una mayor incursión de sus productos, desde sus bebidas tradicionales y otras que ha ido adentrándose como los Jugos del Valle, la marca de té Fuze Tea y expendedoras de café Black. Por su parte Pepsi, no se queda atrás por años ha dominado la industria de comida chatarra a través de Sabritas y su pasada anexión de la galletera Gamesa. Y aun así pretende introducir y reforzar mayor cantidad de este tipo de productos por todo el territorio nacional.
La fuerza de estas compañías no radica en que tanto pueden ofertar sino en que nosotros de forma consciente que tanto adquirimos de ellos. En otro tema más alegre; es la brillante idea de reforzar las tradiciones y fortalecimiento de nuestra industria panificadora, como fue el caso de la mega rosca realizada en el zócalo capitalino por cerca de 400 profesionales del ramo. Más plausible una réplica realizada por cerca de 250 alumnos del Colegio Gastronómico Internacional de Guadalajara que presentaron una mega rosca en la periferia del ayuntamiento de Guadalajara con un peso que rondó entre la tonelada y media y un diámetro de 600 metros; dicha labor titánica fue realizada por largas jornadas y la participación de alumnos de segundo a noveno semestre, lástima que ni para la foto los dejaron posar.
Recuerde que si le tocó el niño de la rosca más que apesadumbrarse por los tamales ha sido usted una persona que estará llena de bendiciones.
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