Ante la implementación en México de diversos sistemas de presas, represas y embalses para el almacenamiento, uso y desvió de aguas de ríos en el país, los ecosistemas que rodean a estos sitios se han visto gravemente afectados, anta la nula aplicación de algún programa de conservación de los mismos, poniendo en riesgo su viabilidad biodiversa.
Al respecto, Alejandro Hernández, de la oficina representativa de The Nature Conservancy (TNC) en Chiapas, dio a conocer a Mi Ambiente que en el estado de Chiapas se busca recuperar las cuencas de sus zonas serranas para tener procesos alternativos de mitigación al cambio climático, aunado a este fenómeno. “Se busca ordenar las cuencas y reforestar zonas degradadas y recuperar los bosques ribereños y detener los sedimentos para que ello no perjudique en inundaciones”, proyectos que son apoyados por el gobierno de Alemania.
Sobre el estado de los ecosistemas junto a las presas y otros sistemas de captación y almacenamiento de agua, se infirmó que “es grave su estado al interior de las cuencas en los sistemas hidroeléctricos del Grijalba, ya que se tiraron árboles, los mismos ríos están al 50% de sus capacidades en Chiapas, es un reto por atender la costa y debe tenerse un proyecto piloto de meandros ya que los ríos tienen zonas naturales de inundación pero estamos invadiendo esas zonas y es un grave conflicto”.
De acuerdo al Centro de Derecho Ambiental, está documentado que la biodiversidad atrapada en los embalsas de las presas se aísla y muere de hambre en gran parte de sus individuos, ya que estos silos de agua son propicios para la aparición de plantas y fauna exótica que les compite en la subsistencia; y se estima que las represas son la principal causa de la extinción del 33% de las especies de peces de agua dulce.
A este respecto a pregunta expresa de Mi Ambiente, el presidente del Tribunal Latinoamericano del agua, Javier Bogantes, comentó que los casos que este tribunal atiende en México en materia de afectaciones del agua es mal manejo de la misma en explotaciones mineras, contaminación de acuíferos por petróleo, expansión de inmobiliarios turísticos, y algunos sistemas hidroeléctricos, que suman unos 60 casos.
“Acabamos de hacer un recorrido por el rio Lerma y en Juanacatlan, Jalisco se aprecia una realidad de un muy mal manejo del agua, esto es una urgencia en México y países latinoamericanos ya que desde hace décadas se vive un stress hídrico y las políticas de desarrollo ponen en peligro a las poblaciones y se padecen absurdo que se invierta en ingeniera hidráulica del mundo y muchas de esas inversiones no benefician a la población”.
Espera que el nuevo gobierno de México entienda la urgencia nacional que debe tener el agua en sus diversos procesos de manejo, uso y preservación del líquido. Debe transformarse la política del estado para conservar el agua de México.
“Hay muchas inversiones para abastecimiento de agua como es el Cutzamala, pero por las situación orográfica por décadas se ha perdido el abastecimientos y los trasvases no son la solución correcta y se tienen problemas por ello”.
Lamentó enormemente que “al platicar de la Agenda del Agua 20-20 con la pasada autoridades de la Comisión Nacional del Agua, dijo que es un excelente plan y al preguntar hace poco del mismo se dijo decepcionado en su totalidad ya que José Luis Luege Tamargo le expreso que por cambios de gobierno no se implementaría pese al anunció con bombo y platillo que se hizo del mismo como de que Calderón dijera que el agua era asunto de seguridad nacional, situación que no se cumplió en la realidad.
Cabe recordar que en México se cuenta con más de 400 mil presas de ellas más de 670 se contabilizan como megapresas por el control de más de 3 millones de metros cúbicos de agua.
De acuerdo al estudio de la UNAM “las presas un reto para la sustentabilidad de las cuencas”, y que es difundido por el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático, en el mundo existen alrededor 60% de los ríos del mundo están represados por poco más de un millón de presas, lo cual conlleva a modificar su paisaje natural y que este nunca pueda volver a su estabilidad biótica.
Se informa que la alteración del agua con presencia de maleza y otros contaminantes que es desemboca por la presencia de las presas afecta a poco más de 46 mil hectáreas de agua almacenada en 114 presas y lagos del país, 12 mil kilómetros de canales y 19 mil de drenes de los distritos de riego.
Comentarios Cerrados