La Secretaría de Turismo de Coahuila invitó a cuando alguien este en su territorio no deje de visitar el Museo del Desierto construido en 1999 en Saltillo, y que tiene como objetivo el enseñar el origen y las características de los desiertos en el mundo, basándose en los tres más grandes y ubicados en México: Chihuahua, Sonora y el Poblano-Oaxaqueño.
Se difundió que en este sitio se cuenta con una sala de exposiciones temporales, un vivero y un patio de lluvia donde llueve cada 14 minutos durante 45 segundos. Siendo sus principales atracciones son los esqueletos de un Tiranosaurio Rex, un Hadrosaurio y un Quetzalcoatlus, cuyos restos fueron encontrados en el área desértica de la entidad.
En comunicado de prensa del organismo estatal de turismo se dio a conocer que un turista para disfrutar su visita debe recorrer en orden cronológico y vivencial las exposiciones para tanto aprender, relajarse y conocer del pasado de la región y del país.
Todo comienza en el vestíbulo con una breve explicación del lugar el cual se divide en cuatro pabellones llamados El desierto viviente; El hombre y el desierto, un espacio de encuentros; Mamíferos del desierto: la trama de la vida; y Ecosistemas del desierto chihuahuense, siendo algunos de los guías, niños menores de 12 años quienes con gran dominio de la historia detallan la belleza del lugar.
En la Sala I “El Desierto Viviente” se explica los tipos de dunas encontrados en México y los turistas realizan un viaje a las eras geológicas; en el Pabellón III con el tema «Mamíferos del Desierto», se explica que en este ecosistema habita 40 por ciento de las especies de mamíferos que subsisten en el planeta. En los “Ecosistemas del Desierto Chihuahuense», se creó un jardín botánico, por citar algunos de sus atractivos.
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