Guillermo Sánchez /
Rodrigo Cruz
La Reforma Educativa es realidad y ahora es un paquete de leyes, las cuales debe acatar el gobierno y hacerlas cumplir. Es en este último pasaje en donde el interrogante mayor e inmediato al gobierno es ¿Cuándo todos los niños del país estarán en clases, en las aulas y con maestros? Más de un millón de niños han pasado semanas sin clases; los maestros abandonaron las aulas y viven en plantones y marchas callejeras en la capital del país.
La reforma no es de un día a otro. Hay que revisar y actualizar los programas de enseñanza, lo mismo hacer con libros de texto, renovación de planteles educativos, construir muchos planteles escolares, la capacitación, con cursos, para tener una base magisterial de calidad lleva tiempo. Pero el ausentismo, el abandono de las aulas y de las clases, la nueva ley de educación contempla acciones de castigo.
La reforma constitucional se hizo. Las tres leyes secundarias se aprobaron, destacando la de evaluación de los maestros. Por lo menos cada 4 años serán examinados. Lo más sobresaliente en lo inmediato es que laboralmente se les debe pagar a los docentes los días que trabajan y si faltan no se les paga, incluso, la ley contempla el despido.
En acto cumbre, en la residencia presidencial de Los Pinos, el Presidente Enrique Peña Nieto firmó el decreto, 10 de septiembre, que ordenó la publicación de las leyes de reforma y paralelamente entraron en vigor.
En el evento estuvieron diputados y senadores, gobernadores, presidentes de los partidos del Pacto por México. Incluso, hablaron: Jesús Zambrano, César Camacho Quiroz y Gustavo Madero. Habló el secretario de Educación Emilio Chuayffet, con un discurso lleno de síntesis histórica y de citas a intelectuales. El mandatario Peña Nieto exaltó la coincidencia y voluntad de proyectos e favor del país, a través del PAN, PRD y PRI. El Pacto por México tiene frutos.
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