Hasta hace relativamente poco tiempo, el café era el segundo generador de divisas para México, sólo superado por las exportaciones de crudo; ahora, México compra en el extranjero el 40 por ciento de los alimentos que satisfacen el hambre de su población.
Esto, de por sí, es grave. Pero es más alarmante el hecho de que, junto con los cultivos de productos básicos, se siembren enervantes en las tierras más pródigas que, otrora, fueron alacenas del país.
La revelación fue hecha por el presidente de los Tribunales Agrarios (TA), Ricardo García Villalobos, al participar en el foro “Seguridad jurídica en la inversión, compra y participación en tierras ejidales y su ordenamiento en materia ambiental”, realizado por la Barra Mexicana. Colegio de Abogados, A.C.
García Villalobos expuso la necesidad urgente de que el campo sea considerado por el gobierno federal como un tema de seguridad nacional para que vuelva a ser generador de los alimentos que requiere la población, cada día más exigente y demandante de mejores productos.
Ricardo García Villalobos
Ante especialistas agrarios del país, García Villalobos destacó la forma en que las últimas administraciones públicas federales han vuelto la espalda a la producción agropecuaria, de tal forma que actualmente sólo el 60 por ciento de los alimentos se generan en el agro nacional.
Dijo que ni el expresidente Fox, quien se decía ranchero, como tampoco el actual mandatario, Felipe Calderón, originario de Michoacán, uno de los estados de raigambre agropecuaria, han hecho algo por revertir esa situación.
Por el contrario, la poca atención al campo originó múltiples vacíos que, en las últimas décadas ha aprovechado el narcotráfico para llenarlos, al otorgar a los hombres del campo semillas, créditos y asistencia técnica para incentivar la producción de esos cultivos ilícitos.
“No es que se dediquen grandes extensiones al cultivos de enervantes, sino que el narcotráfico entrevera esas siembras con la producción de básicos”, refirió García Villalobos.
El tema del cultivo de enervantes en el agro nacional no es nuevo. La primera denuncia se tuvo a finales de la década de los 80s. cuando los obispo del sur (Oaxaca, Guerrero, Chiapas y Tabasco) hicieron pública una carta pastoral donde alertaban sobre tal hecho, incluso, en algunas ocasiones los narcotraficantes obligaban a los campesinos a sembrar esos ilícitos, señalaron.
El problema se agudizó con la entrada en vigor del TLCAN que obligó a los campesinos a abandonar sus parcelas para convertirse, básicamente, en migrantes.
García Villalobos asegura que, actualmente, el 30 por ciento de la tierra cultivable estaría bajo el mando de los narcotraficantes, quienes ofrecen hasta seguridad a hombres del campo.
México cuenta con 30 millones de hectáreas arables, de las cuales ocupa entre 24 a 25 millones para el cultivo de 20 productos, entre básicos y comerciales, en sus dos ciclos agrícolas.
La cosecha anual correspondiente a 2009 fue de 201 millones de toneladas, de las cuales unas 60 correspondieron a alimentos; el resto se repartió entre productos pecuarios, forrajeros y de exportación.
En una tercera parte de los cultivos nacionales participa el narco, denunció Ricardo García Villalobos, presidente de los Tribunales Agrarios.
PROCAMPO
El programa de apoyo a la producción agropecuaria surgió a raíz de la firma del TLCAN. Es un mecanismo para apoyar a los productores de granos básicos que busca equilibrar los subsidios gubernamentales que otorgan los socios comerciales (EU y Canadá) a sus agroproductores.
Actualmente, el apoyo es de mil 300 pesos por hectárea. El núcleo mayor los componen agricultores que cultivan menos de 5 hectáreas.
Desde su nacimiento se han tenido sospechas de que muchos de esos beneficios van a manos de narcotraficantes. “La entrega de Procampo es a la parcela; si un miembro de una familia se dedica al narcotráfico y se beneficia de esos recursos no es fácil detectarlo”, ha dicho la Secretaría de Agricultura (Sagarpa) cuando se le cuestiona sobre tal situación.
El último intento por sanear el Procampo se tuvo recientemente, pero fracasó por supuesta intervención del exsecretario de este ramo, senador Alberto Cárdenas Jiménez.
En información oficial, enviada por Cárdenas Jiménez, desmiente tal posibilidad, al asegurar que un solo integrante de la Comisión de Agricultura del Senado de la República no puede echar abajo esa revisión.
“Se requiere de todos”, dice Cárdenas, y avala su rechazo con copias firmadas de la minuta respectiva.
OTROS “FOCOS ROJOS”
En posterior entrevista, García Villalobos dio a conocer que existen más de 200 conflictos agrarios en el territorio nacional, 20 de ellos son “focos rojos”, pero todos, en un momento determinado, pueden convertirse en bombas de tiempo que deben desactivarse.
“Esta es otra de las razones por las que el gobierno federal debe considerar al campo como un asunto de seguridad nacional”, comentó.
Rechaza Cárdenas Jiménez bloquear depuración de Procampo
El senador Alberto Cárdenas Jiménez desmintió información que lo relacionaba con el bloqueo de la depuración del Procampo, “en ningún momento, como senador de la República y miembro presidente de la Comisión de Agricultura y Ganadería, he detenido o bloqueado la transparencia y/o depuración del padrón de PROCAMPO”, expuso.
Destacó que la pasada administración publicó la Ley Federal de Trasparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, el 11 de junio del 2000, la cual obligó a todos los programas federales, como PROCAMPO, PROGAN, Diesel Agropecuario, Fomento Productivo, Café y Gasolina Ribereña a hacer pública su información.
Aclaró que la información que lo acusa de entorpecer la depuración de Procampo es irreal. Se trata de dos iniciativas que contempla el dictamen aprobado el 08 de diciembre del 2009, presentadas por los senadores Adolfo Jesús Toledo Infanzón, Ramiro Hernández García y Francisco Herrera León del PRI, los días 18 de noviembre de 2008 y el 05 de marzo de 2009, explicó.
Los dictámenes fueron estudiados y analizados al interior de la Comisión de Agricultura y Ganadería, cada uno de los senadores integrantes tuvo oportunidad de enviar su propuesta y señalar sus argumentos en favor o en contra del proyecto de dictamen. El 25 de noviembre de 2009 los senadores asistentes a la reunión de la Comisión aprobaron el dictamen que determinaba que las iniciativas propuestas quedaban sin materia, ya que sus objetivos estaban cubiertos por las Reglas de Operación de la SAGARPA y por la legislación federal vigente.
Los tres senadores promoventes estuvieron de acuerdo con el dictamen elaborado por la Comisión de Agricultura y Ganadería del Senado y firmaron dicho documento, además de que participaron de manera previa junto con sus asesores y los otros integrantes de la Comisión. Finalmente, se determinó que ante la falta de vigencia de la Ley de Capitalización de PROCAMPO quedaban sin efecto los planteamientos presentados. El dictamen se aprobó por los integrantes de cinco Comisiones del Senado, Agricultura y Ganadería, Desarrollo Rural, Recursos Hidráulicos, Reforma Agraria y de Estudios Legislativos Segunda, conformadas por senadores de todos los grupos parlamentarios.
En este sentido el 6 de abril de 2009 publiqué, cuando fungía como titular de Sagarpa, en el Diario Oficial de la Federación un Acuerdo para modificar y adicionar diversas disposiciones de las Reglas de Operación, entre ellas la que creó una nueva cuota para los pequeños productores de temporal, elevándose a $1,300 pesos por hectárea, a la vez que se estableció un límite de apoyo máximo por beneficiario de hasta por $100 mil pesos, donde antes no había límite. Cárdenas Jiménez anexó firmas del dictamen señalado.
Cambio Climático, a la deriva en la ONU
La frustrada cumbre mundial, sobre Cambio Climático, de Copenhague, sigue causando estragos y la frustración crece al intuir que no habrá avances mayores hacia la renovación del tratado de Kyoto que vence el 2012. Y que este fin de año el encuentro será en México. Todo se ve con nubarrones, por la renuncia de Yvo de Boer, al cargo de secretario de la Convención de Naciones Unidas para el Cambio Climático. Boer condujo la reunión de Copenhague, con la asistencia de más de 100 mandatarios.
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