Los diputados de la LXII Legislatura aprobaron diversas modificaciones a la Ley General de Cambio Climático, para que la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano (SEDATU), enfoque sus acciones a prevenir o disminuir la generación de gases de efecto invernadero.
Así, los artículos 17,45 y 84 de la citada Ley incorporan a la dependencia en la estructura de la Junta de Gobierno de la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático, y como integrante del Comité del Fondo para el Cambio Climático.
De esta manera, se garantiza que las acciones y objetivos de la Sedatu estén enfocados al aprovechamiento sustentable de los distritos rurales, y los programas de asentamientos humanos y desarrollo urbano, coadyuven a la mitigación y reducción de los gases de efecto invernadero.
Se deberán sumar esfuerzos con las diversas dependencias federales y gobiernos locales para que el desarrollo de los centros urbanos y de las áreas rurales, incluyan acciones en materia de combate al cambio climático.
La inclusión de la Sedatu, permitirá que sus acciones se encaminen a generar un desarrollo sustentable de las ciudades; a contar con sistemas mejorados de movilidad y, a una adecuada gestión de los residuos que no sólo consista en cómo recolectar sino cómo disminuir su generación.
El dictamen remitido al Senado de la República para sus efectos constitucionales,precisa: las ciudades hoy día, crecen y se desarrollan en conjunto con la naturaleza, protegiéndola y adecuándose a las nuevas formas para estar en convivencia con el medio ambiente y evitar más daños que beneficios.
Al fundamentar el dictamen, la secretaria de la Comisión de Cambio Climático, diputada Rocío Adriana Abreu Artiñano (PRI) destacó: la Sedatu, deberán promover un desarrollo de las ciudades y el campo en armonía y sin dañar el medio ambiente.
“Se busca garantizar que los planes de desarrollo y crecimiento de las ciudades incluyan las acciones en materia de mitigación y adaptación, así como ocasionar menores daños al ambiente”.
Los diputados coincidieron en que estas reformas influirán para que las ciudades sean sustentables, no sólo en el tema de cambio climático, sino en proteger a la población que vive en entidades rurales, siendo éstas sumamente vulnerables.
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