Y sí, ya han pasado muchos años desde que Nintendo comenzó como una pequeña empresa familiar que hacía barajas hanafuda en 1889, para 1963 entraron en el negocio de los taxis y los moteles… para luego ver que los juegos electrónicos era el siguiente paso y eventualmente los videojuegos.
Y de esos tiempos, las cosas han cambiado y hay que aceptarlo, Nintendo ha perdido el norte, al no saber negociar con la industria y sus consumidores, con el Wii tuvieron mucho éxito al atraer a ese grupo de personas que no consumían videojuegos, pero no supieron cómo mantener a esos nuevos consumidores, tampoco supieron como satisfacer las demandas del resto de los jugadores.
El problema es que lo mejor sería que si un jugador compra una consola, con eso le debería de bastar, ahí debería de encontrar todos los juegos que le gusten, pero desde el Nintendo 64, hay lo que se conoce como “el impuesto Nintendo”, es decir, un jugador que tenga una consola de Nintendo debe comprar otra para poder tener más juegos, sobre todo, los más populares.
Con el Wii U se supone que se debería de haber evitado eso, pero una vez más, Nintendo no escuchó lo que la industria pedía: una infraestructura on-line en forma, como es Xbox Live o PSNetwork y un disco duro de serie para vender contenido extra y más potencia… se cumplió, pero todo es a medias. Nintendo Network aún no está a la altura de lo que ofrece Microsoft o Sony. El tener que depender de dispositivos externos de almacenamiento porque las 32 GB y, aún peor, en el modelo básico de 8 GB, son insuficientes y, sobre todo, la baja potencia de la consola, porque ojo, si bien eso no define el éxito de una plataforma, es cierto que para poder tener ciertos juegos, sobre todo aquellos AAA, se requiere un mínimo y si decidieron apostar en el mando pantalla en vez de más potencia, entonces Nintendo debe apoyar a los desarrolladores para que los juegos que salgan en PS4 y Xbox One puedan llegar al Wii U, porque de que se puede, se puede, claro habría que sacrificar gráficos y demás, pero con mucho apoyo (y dinero), se podría lograr que el Wii U tuviera éxito, pero eso, depende de Nintendo.
Porque tienen muy buenas franquicias, nadie puede negar que Mario, Link, Samus, Pokemón, etc., han podido vender muchos juegos de calidad, pero Nintendo no puede vivir sólo de eso y en lo que va del año han salido varios juegos que sin problemas pudieron llegar al Wii U, por ejemplo Destiny, y si este juego salió las otras consolas, entonces sin problemas pudo haber llegado salido para Wii U, ¿otro ejemplo?, Minecraft o Diablo 3, en ambos juegos se pudo haber aprovechado muy bien la pantalla táctil del mando…
Por otra parte, en el ámbito de las portátiles hay algo que lleva año gestándose, los juegos en los teléfonos inteligentes tienen algo que Nintendo ha perdido: juegos arcade. La gracia de una portatil es que puedes jugar por breves momentos, porque para juegos más complejos están las consolas en casa. Todos los días veo a personas disfrutando de «jueguitos casuales» en sus teléfonos, titulos que bien podrían salir en el 3DS y claro, siempre hay lugar para juegos más complejos, pero en el GameBoy y GameBoy Advance, la situación era diferente, los teléfonos ofrecía juegos mediocres, pero el tiempo alcanzó a Nintendo y ahora deben ver como recuperar a millones de personas que prefieren jugar en su teléfono en vez del 3DS.
En fin, ya dejo de hacer mi berrinche y feliz aniversario Nintendo.
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