Para los turistas es esencial el contar con una buena comida, que es sin duda uno de los elementos que marca la experiencia al conocer un destino, por ello Uruguay ofrece una experiencia completa de texturas y aromas que van desde la naturaleza, la arquitectura, las aguas termales hasta los recintos históricos; todo ello acompañados de los sabores únicos donde la cepa Tannat y el asado, conquistan hasta el paladar más exigente a nivel internacional.
Esta experiencia en la nación charrúa comienza en uno de los tesoros naturales más espectaculares en Sudamérica, sus balnearios de Valizas y Cabo Polonio ubicados en la zona costera uruguaya, destinos que presentan un contraste singular de gran atractivo para los visitantes, ambos cuentan con playas oceánicas, un entorno rustico rodeado de inmensas dunas y grandes paisajes lo que permite adentrarse en la naturaleza marítima y surfear en las playas o cruzar a pie las dunas que separan ambos balnearios.
Este sabor uruguayo se encuentra en la zona sur del país en Colonia del Sacramento, cuyo atractivo turístico se basa gran parte en su gastronomía y en la mezcla de sabores que permite al turista llevarse una experiencia culinaria única, al tiempo que se adentra en la historia de la nación sudamericana.
Cultura sudamericana que es posible apreciar al caminar por las calles de sus ciudades y que también permiten encontrar la mezcla perfecta entre condimentos y aromas de la cultura portuguesa y española así como el sabor uruguayo tradicional.
En comunicado de prensa se detalló que el principal referente gourmet de la zona de Sacramento son los restaurantes show, como el drugstore los cuales resaltan de inmediato ante los ojos del turista por su pintoresca decoración que van desde autos convertidos en macetas hasta coloridos cuadros que cuentan la historia de Uruguay.
Cabe mencionar que la cocina uruguaya es sin duda uno de los elementos más importantes para la industria del turismo, ya que representa una mezcla de sabores únicos y tiene su origen en la llegada de los primeros inmigrantes europeos a tierras charrúas, quienes adaptaron sus tradiciones a los platillos autóctonos lo que dio origen a los productos emblema como son la carne, el vino, el cordero, los lácteos, el arroz, el dulce de leche, el mate y los cítricos.
Para el turista la oferta no termina con un buen corte, el este uruguayo ofrece al visitante playas únicas de arena blanca, buenas olas para los amantes del surf y bosques míticos pero sobre todo una amplia variedad de pescados, mariscos, y camarones que deleitaran hasta el más exigente de los paladares, entre los platillos más frecuentes se pueden encontrar lenguados con diversas salsas, salmón a la manteca y calamares leoneses.
Los amantes del ecoturismo pueden encontrar una experiencia única en esta zona, ya que pueden probar su habilidad sobre la tabla de surf y vencer el vértigo de un mar agitado o bien adentrarse en las dunas para realizar un descenso similar entre arena y tierra. Al terminar el día nada mejor que adentrarse en la ciudad para disfrutar de un espectáculo que involucra acróbatas, malabaristas y hasta una orquesta de música balcánica siempre acompañado del sabor del emblema charrúa una copa de vino de Tannat.
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