Después de dos años de espera, Manu Chao regresó a México con la gira «Tómbola», para la presentación de disco «La Radiolina»; como era de esperarse los conciertos fueron un éxito, los sencillos prendieron a la banda y la participación de la Maldita Vecindad en el concierto dado en el Foro Sol fue tan espectacular como siempre. Para no variar al estilo del cantante, las fechas fueron clave, ya que la presentación en Querétaro se realizó el 2 de Octubre, quizá fuerte relación gracias a su postura izquierdista y de liberación.
Manu Chao no empezó como solista, tuvo varios grupos comenzando por Joint Culasse, pasando por Le Hot Pants y Los Carayos, aunque el éxito lo encontró junto con su hermano y primo en la gran banda Mano Negra; la cual, también abarcaba temas políticos y posturas en desacuerdo con las decisiones de los líderes de diferentes países.
En el ’94 ésta banda se despide, dando inició a toda una nueva época ya que, a pesar de lo que se cree, Manu Chao no es un grupo, es un conjunto de músicos bajo el liderazgo del solista José Manuel Thomas Arthur Chao, a veces conocido como Oscar Tramor. Este francés canta la mayoría de sus canciones en español y, en ocasiones, agrega frases en inglés o francés.
Sus letras son de alto contenido político o social: la mayoría demuestra su claro desacuerdo con la globalización, existen varias teorías acerca de canciones aparentemente burdas, pero que tienen un contenido profundamente político, como «Primavera» en la que se habla de las horas en diferentes países pero se cree que, en verdad, es una relación entre los países y las horas en que Estados Unidos los ha atacado. Al mismo tiempo, su música refleja mucho amor, pasión por la vida humana, por lo indígena, lo real…
De hecho, en su página (www.manuchau.com.mx) podemos encontrar frases que explican la filosofía de sus canciones, la perspectiva del mundo y de la vida:
«..Nací en París, me críe en Francia, mi familia es de Galicia, del país Vasco.
Tengo Orgullo de tener raíces ahí… Pero más que todo me siento ciudadano del presente… perdido en el mundo… perdido en el siglo… pero el presente es lo que cuenta».
Manu Chao no es sólo un activista desde el micrófono, además de apoyar a grupos como el EZLN al utilizar mensajes de Marcos en sus canciones o la constante referencia al grupo Okupas de Barcelona, hace visitas regulares a pueblos marginados y visita campamentos de refugiados de Tindouf, llevándoles un poco de música y amor.
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