Roberto Ramírez de la Parra, Director General de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), anunció seis medidas estratégicas que involucran a todos los sectores de usuarios y órdenes de Gobierno.
Lo anterior lo informó en el marco de la la entrega de reconocimientos de la Fundación Gonzalo Río Arronte a las mejores prácticas en cobro-pago del agua 2015.
El funcionario informó que, en primer lugar, en breve estarán disponibles en la página web de la Conagua, cuatro guías operativas sobre la identificación de costos para la sostenibilidad, la formulación de políticas públicas de agua, la creación de organismos intermunicipales y la elaboración de reglamentos municipales de los servicios.
Señaló que, como segunda medida, se trabaja en el funcionamiento, a partir del próximo año, del Centro Mexicano de Capacitación de Agua y Saneamiento (Cemcas), en el cual se capacitará en áreas técnicas al personal operativo de los organismos operadores, con el fin de mejorar la eficiencia.
La tercera medida, apuntó, consiste en ampliar hasta febrero de 2016, el plazo para que los municipios y organismos operadores se incorporen al programa Agua sin adeudos, lo que constituye una oportunidad para cumplir con las obligaciones fiscales y mejorar sus finanzas.
En cuarto sitio, mencionó que se elabora una estrategia conjunta con la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación para fomentar el uso más eficiente del agua en el campo y, con ello, vincular la rentabilidad con la sustentabilidad.
La quinta acción consiste en mantener la coordinación con los usuarios, para seguir ajustando las reglas de operación de los programas federales, con el fin de facilitar el acceso a los recursos y adecuarlos a las necesidades locales en materia hídrica.
La última medida que forma parte de las acciones anunciadas, involucra la elaboración de una estrategia que permita hacer un uso más eficiente de los almacenamientos en las presas. Explicó que esto permitirá garantizar agua para todos los usos, por lo menos, por dos años, y, con ello, estar mejor preparados para afrontar las crecientes demandas de agua y las posibles eventualidades generadas por las alteraciones en el ciclo del agua, consecuencia del calentamiento global.
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