Organizaciones civiles denuncian estas acciones dentro de la industria de los zoológicos.
La muerte intencionada de un bebe antílope ocurrió en diciembre de 2015.
Dos asociaciones a favor de los derechos de los animales denunciaron al zoo de Barcelona por la muerte intencionada e injustificada de una cría de antílope asiático recién nacida.
También afirmaron que esta acción forma parte de un fenómeno reconocido y aprobado como una «forma de gestión apropiada» dentro de la industria de los zoológicos.
La Asociación Animalista LiBERA! y la conservacionista DEPANA, Lliga per a la Defensa del Patrimoni Natural manifestaron que el «culling», o eliminación de animales de una población mediante el «sacrificio humanitario», es un fenómeno reconocido y aprobado como una «forma de gestión apropiada» por las asociaciones internacionales y europeas de zoos y acuarios, WAZA y EAZA, de las que el zoo de Barcelona forma parte.
La campaña internacional ZOOXXI propone la eliminación definitiva del «culling» y de otras prácticas de este tipo, las que consideran «repugnantes», a la vez que lamenta sean acciones «habituales y extendidas» en los zoos del mundo.
La muerte intencionada del bebe antílope ocurrió en diciembre de 2015. Al respecto, el zoo de Barcelona justificó la muerte del animal por falta de espacio y de medios en las instalaciones, una práctica, según los denunciantes, muy recurrente en la industria de los zoológicos.
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