Como parte de las labores de conservación y restauración realizadas en forma permanente por un equipo de arquitectos y conservadores, las autoridades eclesiásticas solicitaron a la Secretaría de Cultura del gobierno mexicano requerimientos específicos para la Catedral Metropolitana, ubicada en pleno centro de la Ciudad de México, que en próximos días recibirá la visita del Papa Francisco.
Para dar a conocer los detalles de esas obras, el secretario de Cultura, Rafael Tovar y de Teresa, encabezó un recorrido con representantes de ese importante recinto, así como de la Dirección General de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural y del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
El titular de Cultura indicó que la Catedral Metropolitana es uno de los edificios mejor cuidados en el mundo, atendido en forma permanente y profesional, ya que es de los más ricos de América Latina, no sólo por su construcción, sino por las casi mil obras que resguarda, donde reside la mayor parte del arte virreinal, de los siglos XVI al XVIII.
Precisó que los trabajos realizados por instrucciones del Ejecutivo Federal están avanzados y consisten en la reparación de la reja de acceso, dañada por hundimientos del suelo; adecuaciones a una ventana arqueológica ubicada en el atrio; limpieza de las esculturas que flanquean el acceso a la entrada, como son las tres virtudes teologales de Manuel Tolsá (Fe, Esperanza y Caridad); mantenimiento de los portones principales, así como arreglos de carpintería a piezas afectada por el sol.
Recordó que desde 1859, con las Leyes de Reforma, este bien es propiedad de la nación y desde entonces el Estado mexicano ha asumido plenamente su restauración y conservación, “siempre con una gran coordinación con la Iglesia católica”.
En los últimos 20 años, dijo, se le han hecho trabajos importantes para protegerla del hundimiento del terreno e inundaciones, que, gracias al talento de arquitectos e ingenieros mexicanos, en colaboración con expertos internacionales, han podido tener en las mejores condiciones a la Catedral, una de las más importantes en América Latina y un referente mexicano.
Al interior del templo, precisó Tovar y de Teresa, se reparan los escalones de la Puerta Jubilar de la Misericordia, además de que se realizan trabajos de limpieza de la malla que resguarda la cúpula central, donde posteriormente se efectuará un trabajo más detallado, y en general de los accesos que recorrerá el sumo pontífice.
Por su parte, Raúl Delgado Lamas, director general de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural, explicó que la Catedral Metropolitana está cimentada en un suelo que tiene 80 por ciento agua y el resto de sólidos, por lo que presenta fisuras y deformaciones que de inmediato se corrigen.
Añadió que “tiene buena salud y no dejamos de proveerle la atención constante que nos reclama los imperativos propios del edificio”, dijo, y agregó que para los trabajos de mantenimiento que actualmente se realizan se invirtieron cerca de 250 mil pesos.
Para la Catedral Metropolitana se planteó un programa de mantenimiento y restauración de 2016 a 2018, que comprende su iluminación externa, que se hará por fases.
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