La música traspasa generaciones; la noche del sábado las pupilas y recuerdos lejanos de ambas bandas dejaron un exquisito sabor hecho con el licuado de géneros entre reggae, ska, rock y cumbia.
El sol cedió y las nubes se apoderaron del cielo. Casi en punto de las 7 una lluvia discreta empezó a cubrir el suelo. Una hora y media después, la banda República Fortuna dió una de las bienvenidas más destacadas en la Carpa Astros: la magia que proyecta una banda al debutar en un escenario mexicano es una acto que deberías vivir por lo menos una vez en la vida.
Al ritmo de Recuerdos Lejanos, Cumbia del Güiro, Manipuladora e incluso del cover de Padre Nuestro de Los Fabulosos Cadillacs, la República mostró de lo que están hechos y con su vibra, y coreografías bien estudiadas, dejaron más que los humos encendidos para recibir a Los Pericos.
La hora establecida llegó, cada uno de Los Pericos se colocaron frente a sus instrumentos y en cuanto hicieron uso de ellos el escenario se alejó de las presiones; las diferencias de edades desaparecieron, los niños cantaron y aplaudieron desde lo más alto que sus padres podían cargarlos; los más grandes bailaron y se transportaron hacia aquellos años en los que Los Pericos formaban parte del playlist de sus jóvenes vidas.
Jamaica Reggae fue la primera en sonar. A punto de estrenar disco y de cumplir 30 años en el escenario, Los Pericos reconocieron la entrega del público mexicano al combinar rolas de su nueva producción y de las ya clásicas Pupilas Lejanas, Sin Cadenas, Complicado y Aturdido, Runaway y Mucha Experiencia.
La madurez de su sonido es notorio, las nuevas canciones que integrarán su nueva producción, próxima a salir en septiembre, fueron bien recibidas por su buena calidad en los oídos y con los pasos de baile de los asistentes , incluso realizaron una versión con mayor énfasis en las percusiones de la rola Caliente.
Finalmente Home Sweet Home retumbo y en la Carpa Astros se vivió una experiencia envolvente y disfrutable antes de que cada quien partiera a su hogar, dulce hogar.
Sin duda, no importa cuantos años pasen, Pericos con las nuevas rolas o las viejitas siguen atrayendo la atención de sus más añejos seguidores, de sus retoños y de distintas generaciones.
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