Las instituciones financieras mexicanas han modificado sus políticas de financiamiento y se inclinan por otorgar créditos a los proyectos que no conlleven niveles altos de impacto ambiental, expuso María de la Luz Calvet Roquero, subdirectora de sustentabilidad de Banamex.
Expresó lo anterior al participar en el Primer Foro Nacional de Adaptación al Cambio Climático, evento organizado por Efecto Verde, en donde indicó que el financiamiento al cambio climático por parte de instituciones financieras públicas y privadas apoya la transición hacia una economía baja en carbono, la reducción de la concentración de gases de efecto invernadero y fomentar la resistencia y adaptación al cambio climático.
Dijo que “hoy en día se requiere un mercado financiero mucho más amplio para la contribución a la mitigación de riesgos y adaptación al cambio climático que contenga regulaciones, que trabaje con los gobiernos para el establecimiento de regulaciones, que haya estímulos fiscales, bonos verdes y participen esquemas de crédito para llevar los recursos a los lugares que se requiere”.
Por esta razón, ahondó en que esa institución ofrece a los analistas de crédito capacitaciones en temas de sustentabilidad, en la que advierten qué regiones son de alta biodiversidad y qué sectores de alto riesgo con el fin de “descarbonizar sus inversiones”.
Comentó que los daños físicos producto del cambio climático ocasionan notables perjuicios a la economía global, como pérdidas multimillonarias, debilidad en el crecimiento económico y un menor rendimiento en las inversiones.
Subrayó que el costo de la inacción ante el panorama del cambio climático por parte del sector público y privado puede alcanzar los trillones de dólares a nivel mundial si se alcanzara un aumento de temperatura superior a los dos grados centígrados.
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