Entre las novedades editoriales para este fin de año, se puede destacar la novela de Xavier Velasco, «Los años sabandijas, que una publicación llena de sarcasmo, destrampe y peripecia, donde no hay más derecho que el atropello y el único deber está en morir debiendo.
Este libro es un viaje en la década que ha marcado al planeta desde finales del siglo pasado, hasta hoy día, los años ochenta, en donde las noches del Atari. El primer Walkman. La gran devaluación. Las blusas con hombreras. El penal que Hugo Sánchez falló en el Mundial de 1986. Los peinados de Pat Benatar. La vieja canción de The Clash. El día del temblor en la Ciudad de México.
De ahí que Los años sabandijas sean un viaje sin frenos por la década desatada, donde al ridículo muy poco se le teme y las leyes parecen obstáculos salvables para el Ruby y el Roxy: dos pícaros inmunes al escrúpulo cuyos caminos se hallan infestados por una variopinta fauna urbana.
Se describen golfos, encueratrices, matones, iluminados, travestis, chantajistas, pandilleros, leyendas de Hollywood, yuppies palancudos, convictos reincidentes, ratas de cuello blanco y algunas cuantas chicas materiales pasan lista en las páginas de esta obra de la picaresca contemporánea, bajo el látigo impío de un narrador con madera de cómplice. La excusa es lo de menos: una vez iniciado el festín de la trácala, todos bailan al son de los papeles verdes.
Cabe mencionar que Xavier Velasco escribe para escapar de un mundo sin quimeras desde que, a edad temprana, contrajo sus primeras mañas de narrador. Cree que la realidad es un mero laboratorio de novela y no duda en saquearla, siempre que la ficción se lo demanda. Abandonó el estudio de las ciencias políticas en favor de la causa literaria, no por falta de amor a la mentira como por el voluble apego a la verdad que hace de la escritura fechoría.
En unos pocos trazos, se considera un producto mexicano y sin duda bastardo del Boom Latinoamericano, Bowie, Polanski, Nico, Wilde, Ibargüengoitia, Rotten y un poco antes de todos su abuela Celia Alcalde: primera narradora y cómplice tenaz de la quimera.
Entre sus anteriores trabjos ha publicado las novelas Diablo Guardián (2003), Éste que ves (2007), Puedo explicarlo todo (2010) y La edad de la punzada(2012). Escribe las columnas Pronóstico del clímax en el diario Milenio y Exceso de equipaje en la revista Aire y, en su blog personal, La leonina faena (xaviervelasco.com).
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