La Comisión Especial de Citricultura, de la Cámara de Diputados, celebró reunión ordinaria el pasado 10 de noviembre. Como invitados, asistieron representantes de organizaciones de productores, práctica que les es común, sobre todo cuando, entre otros asuntos, se discutieron propuestas destinadas a su consideración en la integración del Presupuesto de Egresos de la Federación, 2011.
La sesión de la comisión, presidida por el diputado Miguel Martín López, fue conducida por José María Valencia Barajas, Fermín Montes Cavazos. Los acompañaron, entre otros, los diputados Rafael Rodríguez González, Fernando Santamaría Prieto, Alba Leonila Méndez Herrera, Sergio Gama Dufour, Bernardo Téllez Juárez. Una característica que éstos comparten, representan, a más del pueblo de México en general, a entidades productoras de cítricos: Veracruz, Nuevo León, Michoacán, San Luis Potosí, Oaxaca. Esto confiere un compromiso mayor de los legisladores ante sus electores.
Por parte de las organizaciones de productores, los hubo de las entidades productoras, entre ellos: Antonio Juan Soberón Ferrer y César Cortés, de Veracruz; de Colima, José Villagómez Almanza. Además de las cuestiones presupuestales se refirieron a problemas de producción y desarrollo, a comercialización.
En lo relativo al tema presupuestal, el diputado Montes Cavazos hizo una amplia explicación relativa a la forma en que la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, diseña su estructura programática. No permite bajar al detalle de las acciones, la asignación de partidas. Esto por una solicitud de los productores, de que el desglose comprendiera de manera específica, conceptos como capacitación, combate a plagas, maquinaria, desarrollo agroindustrial, apoyo a la comercialización. Encaminados a una modernización que permita mayor competitividad ante productores internacionales, de manera destacable, los de California y Florida.
José María Valencia Barajas, secretario de la Comisión, ofreció la mayor aplicación en defensa de las propuestas presupuestales tomando en cuenta que “en el año en curso fue muy castigado el sector y ahora deben tenerse en cuenta gastos extraordinarios por la presencia de plagas”.
En cuanto a éstas, una de las de mayor riesgo, es la denominada HLV, que devasta la producción. En relación a ella, la SAGARPA emitió una máxima alerta sanitaria. La enfermedad es ocasionada por una bacteria (candidatus liberibacter), de origen asiático, entró al continente por Brasil, hace cuatro años. “Los daños son disminución de la producción, inicialmente, y si no detectamos y eliminamos los árboles contaminados, prácticamente el total de las matas puede verse afectado, en un plazo de ocho años aproximadamente, se caería la producción y habría muerte de árboles”, según informó en julio del año pasado Héctor Manuel Sánchez, director de Protección Fitosanitaria de la Dirección General de Sanidad Vegetal de la SAGARPA.
Lo que hoy amenaza a los cítricos ha sucedido en otros campos de producción agropecuaria. Por acciones fuera de control de investigadores o desarrolladores de algunas especies vegetales o animales. De allí que cuando las autoridades prohíben la transportación de productos de este origen, aún de manera personal, deba entenderse y atenderse. Tal es el caso de llevar cajas de huevo al sureste del país. No está permitido y el público comúnmente lo ignora.
La reunión de la Comisión Citricultura permitió a los productores invitados a tratar otros temas de la mayor importancia. Nos referiremos a ellos. Entre otros, responsabilidad punible de servidores públicos de la SAGARPA, ante quienes se presentan proyectos de índole agroindustrial, de muy alto valor, y no los aprueban. Posteriormente estos proyectos aparecen, “misteriosamente”, en manos de empresarios que los desarrollan de acuerdo a sus intereses.
Y luego hay quien se pregunta ¿Cómo es que hay tanta desigualdad social en México?
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