POR: Mariana Elisa Cerqueda Segundo (enviada)
Valle de Bravo, Edomex.- Estufas ahorradoras de combustible, que además no dañan la salud ni al medio ambiente, son ahora posible en algunas comunidades mexicanas gracias a un programa especial en donde intervienen diversas empresas y que conjugan el esfuerzo de sus habitantes y la manera en que dichas empresas lograron para hacer más eficiente el uso de ese mueble tan típico y mexicano como lo es una estufa, acción de desarrollo social como de ecología que es impulsado para el mejoramiento de la calidad de vida de poblaciones rurales.
Este programa es impulsado por la empresa Natura, enfocándose en ciertas zonas seleccionadas para poder ser acreedoras de dicha ayuda. Este es un trabajo que se hizo desde un principio en conjunto con las empresas de primer piso, MICROSOL y PROCUENCA, en el Estado de México.
Para poder ver de cerca este proyecto, se pudo visitar una de las comunidades que ya cuenta con dichas estufas ahorradoras, que es Turcio en Valle de Bravo, del Estado de México. Esta población está ubicada en una de las zonas más vulnerables del Estado y nos atendió gentilmente la señora Gregoria Quintero Iglesias, quien nos habló de las ventajas que se tiene de ser una de las beneficiadas de este programa.
La señora Gregoria comenta que se siente muy feliz, ya que con estas estufas se ahorra mucho esfuerzo pues al estar hechas con barro, arena y cemento, calientan más logrando que se gaste mucho menos leña. Ella hace una comparación y dice que con la cantidad de leña que antes ocupaba para un día, hoy en cambio le rinde hasta para una semana con esta estufa ahorradora.
Además, y muy importante, menciona que ya no tiene que estar constantemente inhalando el humo, que fue lo que le provocó una enfermedad llamada EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica) y que le fue detectada desde hace tres años. Los médicos le dijeron que ese trastorno en su salud fue evidentemente provocado por inhalar el humo que se desprendía de su fogón al estar haciendo sus tortillas al mismo tiempo que su comida.
Así, tenemos que con este modelo de estufas lo que se busca es que las personas tengan una mejor calidad de vida y no afecten su salud y al mismo tiempo contribuir a mejorar el medio ambiente.
Cabe mencionar que la empresa Natura -de origen brasileño-, tiene la visión de contribuir a formar consumidores conscientes y al mismo tiempo está también comprometida con el cuidado del medio ambiente. De ahí, derivó que compró los ochenta mil bonos de carbono, a través de Microsol, quien eligió socios locales para poder remunerar lo equivalente a esos ochenta mil bonos de carbono que equivalen a diecisiete mil estufas, que a su vez fueron repartidas en diferentes municipios del país.
Los Estados de Oaxaca, Michoacán, Jalisco, Sonora y Nayarit, además del ya mencionado Estado de México, son donde opera este programa. MICR0SOL es la empresa que se encarga de identificar las necesidades de las personas que requieren esta ayuda. Asimismo, se integraron otras empresas con ayuda de NATURA y se hicieron labores conjuntas para beneficiar a diversos sectores vulnerables. De la misma manera, en diversas comunidades también se ampliaron estos programas con sistemas de agua y sanitarios, siendo ello de gran utilidad por razones obvias. La intención es hacer llegar cada vez a más comunidades este tipo de ayuda y contribuir así a varias metas: mejorar el medio ambiente, ahorrar combustible y elevar el nivel de vida de la población más vulnerable de este país.
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