Tras el éxito de Yalitza Aparicio, la actriz de la película Roma recientemente nominada a los premios Oscar, una ola de comentarios violentaron su condición social en redes sociales, y es que, para el mexicano promedio es impensable que una mujer indígena cuyo destino no es otro más que el ámbito doméstico pueda tener éxito como el que está teniendo Yalitzia Aparicio, explicó Natividad Gutiérrez Chong, investigadora del Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Gutiérrez Chong dijo que este pensamiento está arraigado en la psique del mexicano promedio desde hace 500 años pues es una herencia colonial. “Cuando los españoles llegaron, sometieron a las mujeres nativas y su condición se redujo a la domesticidad, así, pensar que solo las indígenas pueden estar haciendo trabajo doméstico es la interiorización del pensamiento en la psique”, dijo.
Bajo este pensamiento anquilosado, opiniones de actores como Sergio Goyri, diciendo: “que metan a nominar a una pinche india diciendo sí señora, y no señora” tratan de banalizar los méritos de la actriz de ascendencia mixteca.
“Los méritos de Yalitza han sido banalizados creen que no actúa y que está siendo ella misma en la película pero es un error muy grande porque ella es una maestra de preescolar… entonces sí está actuando y respondiendo a las indicaciones de un director”.
La discriminación hacia los indígenas siempre ha existido, aseguró la socióloga, pero hoy lo vemos con más furia porque se están visibilizando muchas situaciones de indígenas que están siendo exitosos, y ese éxito la gran mayoría de la población no lo tolera.
El efecto Yalitza detonado en redes sociales es racismo puro, “y este existe porque él o la racista tiene temor de que el otro, en este caso una indígena, le quite algo que por ser blanco, cree que le pertenece. Asimismo, el racismo es un freno a la movilidad social de los de abajo, es un freno al éxito a los de abajo. Por ello hay tantas descalificaciones”.
Este fenómeno ha ocurrido en menor medida con otros actores sociales como con la indígena María de Jesús Patricio, conocida como Marichuy quien se postuló como candidata para ocupar la presidencia de la República Mexicana el año pasado; no obstante, la violencia fue diferente, tal vez en menor medida porque se veía lejano que alcanzará el éxito. Caso contrario a lo que ocurre con Yalitza.
Comentarios Cerrados