Se dio a conocer que la Agencia Espacial Mexicana (AEM) tiene entre sus retos el que dentro de 15 años sea la industria nacional la que proporcione un porcentaje significativo de las piezas de los satélites que formarán parte del Sistema Satelital Mexicano en sustitución de los que han terminado su vida útil.
Ello fue informado en conferencia de prensa en donde se detalló que el desafío está en lograr que el país desarrolle una infraestructura espacial y genere capacidades suficientes para el desarrollo de este tipo de tecnología, señaló Mario Arreola Santander, director de Divulgación en Ciencia y Tecnología de la AEM.
Se igual forma el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y la AEM firmaron el convenio para la creación de un fondo con 31.7 millones de pesos destinados a financiar acciones de investigación, desarrollo tecnológico e innovación que impulsen el crecimiento del sector aeroespacial en el país.
Enrique Cabrero Mendoza, titular del Conacyt, señaló que este nuevo instrumento es una apuesta del gobierno mexicano para consolidar una industria aeroespacial sólida que genere empleos y soluciones a los grandes problemas nacionales.
El funcionario recordó que entre 2006 y 2012 las exportaciones en el ramo registraron un crecimiento mayor al 16% anual en promedio, y que tan sólo en 2012 el sector atrajo proyectos de inversión por más de 1,300 millones de dólares.
Con el nuevo fondo sectorial, Conacyt y la AEM buscan sumar esfuerzos para impulsar la formación de capital humano, la investigación e innovación, transferencia de tecnología, competitividad y cooperación internacional en este sector.
Por su parte, el titular de la AEM, comentó que “el mercado económico global del espacio es de más de 300 mil millones de dólares y hasta hoy México sólo ha participado como comprador de sistemas satelitales de comunicación con la AEM se abren las posibilidades de que el país desarrolle sus propios satélites y se inserte en el ámbito global como productor de tecnología satelital, terminales en Tierra, y a futuro, que sus científicos y astronautas viajen a estaciones espaciales y al planeta Marte”.
Mientras que Heinz Dieterich, coordinador del Centro de Ciencias de la Transición (CTS) de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), en un encuentro con dicho funcionario federal enfatizó que estamos disfrutando de maravillas tecnológicas que no hubiésemos imaginado y éstas no surgieron de buenos deseos o de pensamientos mágicos, sino del conocimiento objetivo que solo la ciencia produce.
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