De acuerdo a una investigación de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), los pueblos de Xochimilco y sus comunidades agrícolas que han sido despojados del agua de sus manantiales están destinados a desaparecer junto con la ciudad capital si no se toman medidas radicales para detener la expansión de las zonas urbanas. Se indicó que es urgente el reforestar y cuidar los cerros que alimentan los acuíferos, observó Beatriz Canabal Cristiani, profesora-investigadora de la UAM, al participar en el Primer Foro del Agua de los Pueblos del Sur de la Ciudad de México. La investigadora del Departamento de Relaciones Sociales de la Unidad Xochimilco reivindicó las propuestas de Jorge Legorreta para la zona lacustre y su zona de montaña: suspender la urbanización en la chinampa; introducir sistemas domésticos de tratamiento de descargas residuales; aumentar el volumen de agua a los canales y mejorar su calidad.
Consideró necesario terminar con la inercia en que discurre el problema del agua, convocó a hacer realidad el sueño de Legorreta: la construcción de un nuevo paradigma hidráulico en el que las decisiones, concepciones y políticas públicas sean evaluadas con visión institucional y académica para materializarlo en un plan integral de largo plazo para toda la Cuenca de México. Parafraseando a Legorreta advirtió: “La única esperanza para una ciudad que no deja de crecer y destruir sus recursos naturales está en redescubrir las culturas que conservan el amor, la pasión y la fe en la vida lacustre, y por fortuna todavía prevalecen”, como el caso de los pueblos aquí reunidos, añadió la académica. “Como usuarios de un bien central en nuestras vidas debemos tomar conciencia y responsabilizarnos del problema, cuidar los bosques, generar alternativas relacionadas con la urbanización planificada, cosechar agua de lluvia, reutilizar el agua y hacer un consumo mesurado”.
“Son los pueblos a los que se les despoja de este recurso vital para llevarlo a alguna metrópoli los que sí se percatan de tales obras hidráulicas y los que reivindican el agua como parte de sus recursos ancestrales y de su vida misma”. El Primer Foro del Agua de los Pueblos del Sur de la Ciudad de México atrajo el interés de funcionarios de delegaciones políticas, representantes de organismos gubernamentales, organizaciones sociales, comunidades de los pueblos de Milpa Alta, Xochimilco, Tláhuac y Tlalpan y universidades.
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