Por defender sus tierras, que no les han sido pagadas y sobre las que se pretende construir parte de la carretera Toluca-Naucalpan, 14 ejidatarios, comuneros y pequeños propietarios del municipio de Lerma fueron detenidos y encarcelados por la policía estatal.
Desde el pasado miércoles los dueños de las propiedades fueron privados de su libertad tras impedir que personal de la empresa Autovan S.A de C.V., llevaran a cabo los trabajos de medición topográfica y extracción de tierra.
Ante ello Centro de Derechos Humanos “Zeferino Ladrillero” y el Frente De Pueblos Indígenas en Defensa de la Madre Tierra responsabilizaron al gobernador de la entidad Eruviel Ávila Villegas, por la vida de los hoy presos.
A través de un comunicado sostuvieron que el gobernador Eruviel Ávila Villegas protege los intereses de la empresa “Autobahn S.A. de C.V” , quien junto con el apoyo del gobierno local, intentó realizar obras para construir una autopista entre Toluca y el Distrito Federal, que aparte de despojar de manera arbitraria a los legítimos dueños, pondrá en riesgo el medio ambiente de más de 25 kilómetros de tierra comunal y cerca de 3 kilómetros de propiedad privada.
Recordaron un caso similar, el 3 y 4 de mayo de 2006, pero en el poblado de San Salvador Atenco. Ahí hubo una serie de enfrentamientos que terminaron con la vida de dos personas, 146 detenciones arbitrarias y más de 26 vejaciones a mujeres de aquella comunidad; “no queremos un caso más como el de Atenco”.
Hicieron un llamado al presidente Enrique Peña Nieto, al Congreso de la Unión y al Poder Judicial, para que sean liberados -de manera inmediata- el grupo de indígenas otomíes que sólo impedían que les fuera arrebatada sus tierras.
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