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Lección para prevenir en el futuro

Los últimos días fueron una pesadilla para miles de pobladores del Estado de México en su zona conurbana con el Distrito Federal, especialmente en Chalco, Valle de Chalco, Nezahualcóyotl y Ecatepec, donde el desbordamiento del Río de La Compañía el cual saca las aguas negras de la capital del país, ocasionó que pobladores de esta región perdieran sus pertenencias.

La pertinaz una lluvia inusual que se abatió por esta región provocó que el sistema de drenaje se anegara y se retrasaran las obras que se realizan en el Túnel Emisor Oriente, la alternativa de solución definitiva al problema pluvial de la región.

Esta situación de emergencia movió a los tres órdenes de gobierno, sin distingo alguno de banderas partidistas, para enfrentar la contingencia que afectó a esas familias de la zona, una de las más pobladas del país.

El Presidente Felipe Calderón, en su recorrido por la zona de desastre, anunció que “hay un proyecto (el Emisor Oriente) y esto lo tenemos que lograr muy rápido”, aunado a que, enfatizó, el incidente entre otros aspectos se presentó porque anteriores gobiernos durante años no hicieron obras hidráulicas en dichas zonas.

Calderón aseguró que se mantendrá por el tiempo que sea necesario la ayuda a las personas damnificadas por las lluvias, no sólo en el DF y Edomex, sino en todas las entidades en las que las generen estragos y reiteró que lo primero es el implantar el programa de apoyos económicos por la pérdida de enseres domésticos.

El gobernador del Edomex, Enrique Peña Nieto, quien también estuvo presente desde el momento mismo en que se conoció el desastre natural, declaró la voluntad y compromiso de hacer un trabajo conjunto entre el gobierno federal, estatal y municipal, para dar respuesta a todas las familias afectadas.

Se comprometió a corregir la falla que provocó el daño que se ha causado en esta zona, a sacar el agua de las partes anegadas, donde se ha acumulado y a definir un plan de acción que permita proveer de apoyos directos a las familias afectadas.

Dijo que “no se trata de politizar, ni de buscar interlocutores, ni de intermediarismo entre quienes estamos aportando los apoyos y quienes lo reciban”, puntualizó.

De ahí la propuesta y petición que hacemos al gobierno federal para que “aceleremos este proceso”, agregó, tras señalar que “necesitamos generar mejores formas de sacar el agua que se acumula en el Valle de México, porque somos más habitantes y ocurren lluvias con más fuerza cada año”.

Marcelo Ebrard, jefe de Gobierno del Distrito Federal, igualmente, recorrió las zonas inundadas de las delegaciones Iztapalapa, Iztacalco, Gustavo A. Madero y Venustiano Carranza y se sumó a la atención de las demandas de emergencia que la población le hizo en sus recorridos por estas zonas.

También estuvieron presentes la delegada en Iztapalapa, Clara Brugada, y la presidente del DIF nacional, Margarita Zavala, para atender los problemas más ingentes.

Así, se realizó un trabajo coordinado entre el Ejército Nacional, la Marina, autoridades capitalinas y mexiquenses, además de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), organismo que, a petición de Peña Nieto, abrió más la llave para que se tuviera el agua suficiente para el lavado de casas y calles.

Los trabajos para tapar el boquete del río La Compañía no lograron sellarlo y el reventón hizo que la inundación durara más días.

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Trabajo conjunto para hallar la solución definitiva a este problema que afecta a miles de habitantes del Valle oriente.

Cifras de la inundación

Las autoridades mexiquenses contabilizaron más de 30 mil personas afectadas. De ellas, 7 mil 500 correspondían a Ecatepec, con mil 500 viviendas inundadas; 10 mil, a Nezahualcóyotl, en 2 mil viviendas, y 20 mil, en Valle de Chalco que viven en 2 mil hogares.

En el DF fueron más de 10 mil damnificados, especialmente en la colonia el Arenal, donde el 65 por ciento de su población se anegó.

No hubo desgracias personales, pero los daños suman varios millones de pesos.

Túnel emisor

El Túnel Emisor Oriente, que se construye a una profundidad de 200 metros y con 170 kilómetros de longitud, estará terminado hasta 2012. Esta obra permitirá despresurizar los otros cauces que hay en el Valle de México, como es el caso, precisamente, del Río de Los Remedios y Río de La Compañía, en Valle de Chalco, donde aún hay problemas porque no se ha podido reparar la ruptura que sufrió en una de sus márgenes.

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