Laura Rodríguez, directora general del Fondo para la Defensa del Ambiente (Environmental Defense Fund, EDF), comentó que es esencial el trabajar a favor de los mares y pesquerías mexicanas para que sigan siendo nichos sustentables; más cuando México es del top20 en pesca silvestre del mundo. En donde 80% de las pesquerías están sobreexplotadas en afectación de dos millones de familias que dependen de este sector y de cada peso que se saca el mar solo 60 centavos se le agrega de valor cuando en el mundo es de 3 pesos (un octavo de dólar) el valor agregado.
En aras de analizas la realidad de las pesquerías, hicieron un estudio bioeconómico “Pesca y Economía del Océano: sustentabilidad y rentabilidad a nuestro alcance”, que se enfoca en 28 pesquerías mexicanas con su manejo económico y su impacto biodiverso. Este trabajo indica que en estos sitios representan el 60% de la pesca y en 20 años de seguir igual se tendrá una baja con 97% en perdida de su valor económico, lo cual es un grave problema que debe ser transformado.
Por ello debe cambiarse a un Manejo Basado en Derechos (MBD) en la pesca, que podría reflejarse en un incremento en captura y en valor con o de banco de peces en mares que le asegura la sustentabilidad. Se tendría ganancia de 211 millones de dólares extra cada año en ganancia; más presencia de peces en un 70% y un aumento de 24% capturas.
Este sistema es el primer paso es definir que pescadores pueden acceder al recurso, seguido con uso de ciencias para saber las cantidades de extracción de peces; tercer paso que indica que cada pescador tiene derecho a cierta cantidad de captura de peces. Este sistema ya se ha implementado en 350 pesquerías del mundo que ya aprecian beneficios.
Este estudio analizó los impactos que tendría un cambio en la estrategia de manejo y el combate a la pesca ilegal en las 28 pesquerías más importantes del país, que juntas representan casi el 60% del volumen total de producción en 2014. Entre otras conclusiones, determinó que de mantener el modelo actual de pesca, en solo un par de décadas, la captura podría caer hasta en 50% y las ganancias se reducirían en un 97%. Por otro lado, de implementarse el MBD y fomentar el cumplimiento de la normatividad pesquera se generarían más de 211 millones de dólares en ganancias anuales en dichas pesquerías, habría 70% más peces en el mar (lo que se conoce como biomasa) y aumentarían las capturas en 24%, en comparación con no hacer nada.
El MBD propone un esquema de captura total permisible, es decir, fijar una cuota de la cantidad de pescados y mariscos que pueden extraerse sin afectar su población. De esta manera no se sobreexplota la especie y disminuye la carrera por la pesca al hacerlo de una forma más ordenada.
Con ello, también se fortalecen las capacidades empresariales de los pescadores, como planeación estratégica, oportunidad de negociar mejores precios, profesionalismo y control de calidad. Este tipo de manejo funciona ya en más de 350 pesquerías a nivel mundial, algunas de las cuales están en México.
Actualmente se producen cerca de 1,750 toneladas de pescados y mariscos en el país, lo que posiciona a México como uno de los 20 mayores productores de pescados y mariscos a nivel mundial. Sin embargo, el 80% de las pesquerías analizadas se encuentran sobreexplotadas o en su máxima capacidad y el poco valor generado por la pesca hacen que el sector pierda competitividad con el resto del mundo.
Indicó que existen muchos sectores para coordinarse y recordó que nuestro país se tienen un México y medio en área oceánica y es un sector de gran potencial biodiverso así como económico que puede ser implementado por medio de replicar estos modelos, promover la modernización del sector, actualizar el marco legal y aplicar ciencia en estos sistemas de pesca. Este modelo de derechos se aplica en 350 pesquerías del mundo y en 10 de México en estados como son Sonora, Baja California, y Quintana Roo.
Sobre esta nueva iniciativa de aprovechamiento de una pesca sustentable, expuso ya se ha presentado a los poderes legislativos que tienen el compromiso que en este periodo de sesiones se modificará la ley de pesca nacional con el compromiso de usar estudios con base de ciencia.
Rodríguez Harker puntualizó que “México tiene una oportunidad histórica de capitalizar la riqueza que se encuentra en sus mares. Este estudio muestra que es posible tener una pesca más eficiente, rentable y sustentable en beneficio de la economía del país y de millones de familias mexicanas. Lo que proponemos es cambiar la estrategia de manejo en México hacia un modelo basado en ciencia y herramientas económicas para fortalecer a esta actividad de la que dependen más de 300 mil familias en el país, para obtener más pesos y no más peces de nuestros mares.”.
En comunicado de prensa se detalló que entre los casos de éxito más sobresalientes en nuestro país, se encuentra el de la curvina golfina en el Golfo de Santa Clara, que implementó el MBD en 2012. Gracias a la toma de acción conjunta entre autoridades, pescadores, científicos y organizaciones de la sociedad civil, la pesquería cuenta con una nueva estrategia de manejo más sustentable. Desde su implementación hasta 2014, las capturas han disminuido cerca del 40%, pero las ganancias para el pescador han aumentado en 8%, lo que muestra que es posible pescar menos, pero ganar más.
Para ilustrar este caso de éxito, en el evento se contó con la presencia del pescador Rual Verdugo, quien narró que antes de la adopción del modelo, la pesca se hacía de forma desorganizada y excesiva, lo que facilitaba la sobreexplotación y desperdicio del producto, así como una menor rentabilidad para los pescadores. Sin embargo, a partir de la adopción de este sistema de manejo, esta actividad se realiza de una forma más ordenada, responsable y con un mayor valor en la producción.
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