Es urgente que México impulse el sector de Ciencia, Tecnología e Innovación (CTI) para terminar con la dependencia que tiene de otros países, sobre todo, al contar con los recursos humanos calificados para hacerlo, dijo Patricio Martínez García, presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología del Senado de la República.
Dijo que “este país no puede seguir dependiendo hasta para hacer un jabón o un refresco de una fórmula que nos llega de fuera. Para qué hacer tantas cosas que consume y produce el país a base de recetas que nos llegan de fuera, cuando está demostrado que nuestro ingenio, nuestro mercado y sobre todo nuestros recursos humanos tienen total y absoluta capacidad para desarrolla nuestros propios productos. Necesitamos tener más ciencia y tecnología por una razón muy sencilla: si no le damos ciencia y tecnología al país, al paso de los años, vamos a quedar sometidos científica y tecnológicamente a agentes pensantes del exterior”.
Reconoció que el país no tiene en CTI un desempeño razonablemente proporcional a lo que tienen otros países similares al nuestro e indicó que “me parece que el espíritu emprendedor del mexicano se ha ido lastrando conforme han ido llegando productos y empresas de fuera de nuestras fronteras. Yo me pregunto: ¿En este país no hay quien pueda desarrollar una fórmula de carbonato efervescente? porque solamente hay una marca en el mercado mexicano, y es extranjera (…) Me parece que la concentración de la riqueza tiene sus límites, entiendo perfectamente la transnacionalización y la ruptura de fronteras que son propias del siglo XXI, pero también me parece que no podemos perder la identidad y no tener nuestro propio desarrollo científico y tecnológico, dándole a los innovadores las facilidades que requieren para que su capacidad creadora llegue a nuestros mercados y a los mercados del mundo, y mejorar las condiciones de vida de nuestra población. Me parece un error grave”.
Señaló que sí hay voluntad política para fortalecer el sector de CTI; sin embargo, falta mayor participación de la comunidad científica buscando posicionarse, no en un puesto de gobierno sino en un puesto de investigación y desarrollo y de las empresas, que al final, son las que goza de los beneficios de la ciencia y la tecnología.
Añadió que “no hay otra posibilidad. Investigue usted cuál fue la ruta crítica que siguió el desarrollo en el mundo y fue ese, y donde no se siguió y lo absorbió el Estado vea lo que les pasó, lo que no pudieron las armas lo pudo la economía, la obsolescencia de las tecnologías fue la causa de su rezago. En el caso de los países socialistas eso fue lo que ocurrió, no se alentaba la innovación y, en contraste, vea el caso de China, cuando quita la condición estatal en donde la hélice era monohélice ahí permaneció aletargado el gigante, y en el momento en que entraron la comunidad científica, el gobierno y la empresa, en ese momento China se convirtió en el gigante del siglo XXI”.
Cabe mencionar que respecto a los países desarrollados, México tiene invertida la proporción en cuanto a inversión en CTI: 70 por ciento gobierno y 30 por ciento empresas. Para lograr una mayor participación privada e invertir la pirámide de inversión (30 por ciento gobierno y 70 por ciento empresas), dijo que ya trabajan en iniciativas que permitan darle el equilibrio al presupuso que requiere la ciencia y la tecnología en el país.
Reclamó que “Papá gobierno no puede estar haciendo una función que no es exclusiva de papá gobierno, así de concreto”, concluyó el legislador del Partido Revolucionario Institucional, quien definió a la innovación como sinónimo de futuro, concepto sin el cual, no hay posibilidad de que una sociedad avance.
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