En el proyecto minero de Peñasquito, en el norte del estado de Zacatecas de la empresa GoldCorp informó que su objetivo es construir un trabajo minero con base a tres aspectos clave versada en dimensiones social, ambiental y económica para que con visión de responsabilidad empresarial les permita establecer prácticas laborales con visión social, productiva y con obtención de producto de bajo costo.
Cabe mencionar que esta mina es catalogada como la mina de oro más grande de América, ubicada en el municipio de Mazapil, uno de los municipios más pobres y marginados de México, con reservas probadas de 13 millones de onzas. En ella laboran más de 3 mil 400 obreros.
Goldcorp invirtió mil 500 millones de dólares en Peñasquito, ubicado 295 kilómetros al norte de la ciudad de Zacatecas, en los límites con Coahuila. Antes erogó mil millones de dólares para comprar el proyecto a la empresa Glamis Gold, también canadiense, que hizo trabajos de exploración.
Rafael Aldapia, director de asuntos externos de dicha empresa, comentó que para un proyecto minero es esencial el establecer una sana relación con la comunidad y el gobierno para llevar a cabo un desarrollo adecuado de los proyectos, sustentados en una visión de responsabilidad social, “ya que la sustentabilidad debe ser parte del éxito empresarial al largo plazo de este tipo de proyectos. Aceptando que en la actualidad es insostenible el mantener el viejo modelo minero y que la minería debe ser aplicada una nueva perspectiva de trabajo con base a la sostenibilidad”.
Cabe mencionar que en México, el 70% de los pueblos mágicos –principales captadores del turismo- tuvo un origen en proyectos mineros y que el compromiso de algunas empresas se refleja en que 28 grupos mineros estén certificados por el Centro Mexicano de Filantropía (Cemefi); y que cuatro estén inscritos en el índice de sustentabilidad de la Bolsa de Valores en parte por su aportación de mil 522 millones de pesos en aspectos ambientales y que en 7 años han plantado 1315 millones de plantas a lo largo del país.
En gira de trabajo en la mina Peñasquito, ubicada a 270 kilómetros al norte de la capital del estado de Zacatecas, dicha empresa estableció que es esencial la visión personal y de seguridad en una mina, siempre privilegiando el trabajo humano que les ha permitido contar con empleados originarios de 25 entidades federativas.
En la minera Peñasquito se aprecia que entre sus trabajos ambientales se cuenta con un relleno sanitario en donde se cumple de acuerdo a normas oficiales 059 de la Secretaría de Medio Ambiente (Semarnat), además de hacer un separado y reciclado de metales, plásticos, cartón, entre otros. Ejemplo de este reciclado es el cartón que suma unas 2 toneladas al mes.
Además del uso de residuos peligrosos que son tratados para un reúso así como mandados a instalaciones exprofeso que hacen uso y disposición final de las mismas, así de buscar valorización de lo reciclable, siendo los aceites de la maquinaría el elemento peligroso que más genera esta mina, así como elementos físicos contaminados.
Se mencionó que estos canaletas de desechos instalado es seco, pero por seguridad se tiene una cisterna y canales de verificación de lixiviados para así cumplir la norma 083 que habla de los rellenos sanitarios y se expuso que estos silos son de varios años de vida al manejar pacas comprimidas en compactares de “pata de cabra” que permita ampliar a cinco años su vida útil.
Peñasquito, es un proyecto en funcionamiento desde 2009 al 2013 y ha permitido recuperar un estimado más allá de 17 mil toneladas en su mayoría de chatarra de acero que es desechada y comercializada para darle un reúso a estos elementos.
En cumplimiento de certificación del uso y tratado de agua, las piletas de jales que aún mantienen niveles de químicos altos, se trabaja en aislamiento de estos sitios con agua con barreras para evitar que la fauna terrestre y aérea la consuma, a la vez que se labora en su saneamiento, -presa de jales-, y que sus valores de químicos estén por debajo de los valores oficiales y se evita el riesgo de contaminar.
TRABAJO PARA REHABILITAR A LA BIODIVERSIDAD
Se resalta que en total de la mina -12 mil hectáreas-, unas 1,500 hectáreas se dedican a la Unidad de Manejo Ambiental (UMA) que se instaló para poder colocar a las especies encontradas en la zona de la mina. Siendo diversas las especies removidas como son las serpientes, roedores, arácnidos, canidos con más de tres mil ejemplares reubicados.
Alfonso Macías, uno de los encargados de la fauna, señaló que entre sus actividades que sobresalen es rescatar la flora y fauna en primera instancia –ya que en la minería moderna son los especialistas de medio ambiente los primeros y últimos de estar en el estudio, instalación, funcionamiento y cierre de una mina-, como son las cactáceas localizadas en todos los lugares en donde se colocará maquinaría, caminos, instalaciones, etc.
Desde 2006, tres años antes de los funcionamientos de la mina a tajo abierto que se ubica en este sitio, los especialistas ambientales comenzaron su labor de preservación y a la fecha llevan más de medio millón de plantas rescatadas, siendo 26 mil plantas que están ubicadas en conservación prioritaria.
Ciertas cactáceas como cactus u órganos llegan a pesar hasta media tonelada y requiere de trabajos especiales en su remoción tanto en mano de obra como maquinaria.
Un caso especial es el rescate de suelo orgánico que al final de la vida útil de la mina debe utilizarse para remediar la zona de trabajo y que al momento servirá para darle vida a todas las zonas removidas por la mina y al momento llevan cientos de toneladas de suelo fértil que ya está siendo acumulado en espera de su uso en unas décadas y al momento son 2.7 millones de metros cúbicos almacenado en 9 depósitos.
Un caso especial en la biodiversidad que se tiene en UMA –que no maneja el uso cinegético, sólo de reproducción-, es el venado cola blanca y con un convenio con la Semarnat, tras la reproducción de esta especie que andan en libertad, se analiza el llevarles a otros sitios para repoblar otros ecosistemas. Al momento se estima que se han registrado 10 crías nacidas en dos años, aunado a trabajar con las poblaciones locales para que estas especies al permanecer ofrecen alternativas de desarrollo como es el turismo de observación y el ecoturismo y se evita su extinción.
Mientras que en tema educación, Gold Corp apadrino un plantel de Conalep en la región y se brinda apoyos a diversos rubros sociales al gobierno estatal por un monto de 72 millones de pesos en 2012, todas estas acciones que les ha permitido contar por 6 años consecutivos con el reconocimiento de empresa socialmente responsable y que esperan que este año dicho reconocimiento se repita.
PEDIMENTOS DE LA SEMARNAT EN ESTE CASO
La Semarnat autorizó la operación de la mina el 18 de diciembre de 2006. En el dictamen acotó que el permiso estaba condicionado debido al uso de sustancias químicas peligrosas para procesos de separación y refinamiento de oro, plata, zinc y plomo.
Hace unos años, la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental de la Semarnat indicó que Peñasquito podría emitir “ácido cianhídrico si la solución cianurada (usada para el beneficio de minerales) no se mantiene a un pH adecuado”. Una concentración de 300 partes por millón de ácido cianhídrico en el aire basta para matar a un humano en minutos. La dependencia determinó que la solución de cianuro de sodio utilizada por Goldcorp deberá tener pH mínimo de 10.5 y deberán instalarse alarmas de detección de ácido cianhídrico.
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