Atisbos

CONFIABILIDAD.- Casi 19 años le ha llevado al Instituto Federal Electoral perfeccionar la credencial de elector y garantizar seguridad en la identidad de los ciudadanos. Ello es lo que hace posible que dicha credencial sea vehículo de identificación confiable, de reconocimiento oficial, y sea medio para promover la democracia. A pesar de ello, el Presidente Felipe Calderón anunció la intención de emitir una Cédula de Identidad Ciudadana, de la que hasta el momento se desconocen sus características. Será en la presente semana cuando Fernando Gómez Mont, secretario de Gobernación, y Leonardo Valdés Zurita, presidente del IFE, se reúnan para hablar del tema. Empero a decir de éste, si desde la perspectiva del marco jurídico vigente la credencial para votar con fotografía no cancela la posibilidad de explorar otros medios de identidad ciudadana, sí exige que considere “todos los mecanismos de seguridad” y los acuerdos demo-gráficos tomados en torno al alcance de la credencial del IFE. La pregunta que surge es ¿tendrá algún sentido gastar dinero en la emisión de esa cédula, dada la crítica situación económicas del país?
IMPROVISACIÓN.- La falta de preparación de los integrantes de la Cámara de Diputados es lo que ha dado la nota de distinción en cuanto a su desempeño en las diferentes legislaturas. Y, la LXI que iniciará labores el próximo 1 de septiembre no será la excepción. El libro “Modelo de Desarrollo Parlamentario”, presentado en la Cámara de Senadores, refiere: de los 500 nuevos diputados, 4% tienen educación medio superior, 50% cuenta con educación superior y 15% han realizado un posgrado, pero del restante 31% no se dice nada ¿serán a caso ellos los improvisados y faltos de preparación? Pero, 231 tienen experiencia parlamentaria. Miguel Alcántara Soria y ocho coautores sostienen que la radiografía de los grupos parlamentarios constata que aún con muy buena voluntad y muy buena intención, la “improvisación y la falta de preparación” es lo que caracteriza las legislaturas federales y locales. Pero a decir de Gustavo Madero Muñoz, presidente del Senado, ante el mensaje de los electores expresado el 5 de julio, los legisladores deben fortalecer la imagen de los congresos y prestigiar su labor. En sentido realista, Carlos Navarrete, coordinador del PRD, reconoció que el Congreso de la Unión y sus grupos parlamentarios no gozan hoy del mayor prestigio y reconocimiento de la sociedad.
¿FESTEJO?- En 2010 se cumplen el Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución Mexicana, hechos históricos que serán celebrados con bombo y platillo por todos los gobiernos: federal, de estados y municipios, sin distingo de partidos políticos. Todos reportan estar listos para los festejos, pero y el pueblo, ¿qué pasa con él en la víspera? Este año el número de pobres que no tienen dinero para alimentarse creció a 56 millones, el desempleo aumenta y los millones de jóvenes que aspiran cursar estudios superiores ven cancelados sus anhelos por no tener cabida en universidades públicas. En medio de esta situación y como para no crear una mayor alarma e irritación social, la Secretaría de Hacienda emitió el comunicado más corto que jamás ha leído quien esto escribe (cinco líneas), en el que afirma que “no hay ninguna modificación a la política de precios y tarifas públicas”, en relación a que para 2010 se contempla una reducción al subsidio de tarifas eléctricas. Por desgracia, el congelamiento de los precios de gasolinas, gas LP y diesel decretado por el gobierno vence el último día de 2009, y en tanto, acaba de anunciar un aumento de 3.8% ponderado en el peaje de carreteras. ¡Qué festejo! ¿No?
DINAMISMO.- La industria petrolera se significa por ser de las más productivas del país y en la que el Estado aplica una constante y significativa política de inversión. Entre enero y junio del presente año ejerció 110.5 mil millones de pesos. Eso permite a Petróleos Mexicanos avanzar en su programa de inversiones previsto para 2009 y en el fortalecimiento de su infraestructura productiva para atender la demanda de hidrocarburos, con la consecuente generación de empleos y apoyo a la economía nacional.
NO.- Estados Unidos insiste en su política intervencionista hacia México. En lo referente al otorgamiento de recursos para combatir el crimen organizado, pretende certificar el respeto a los derechos humanos en las operaciones de combate que lleva a cabo el gobierno. Por ese motivo, la Comisión Permanente del Congreso de la Unión exhortó al Presidente Felipe Calderón a responder con un no rotundo, a que rechace “de manera contundente” el condicionamiento de la ayuda.