Morelia, Mich.- México dará un paso trascendente en la explotación del agro nacional. Al amparo de la reforma estructural del campo, cuyas propuestas recoge por ahora, la Secretaría de Agricultura (Sagarpa), desincentivará el cultivo de cereales (maíz, básicamente) para enfocar sus esfuerzos al de frutas y verduras.
El anuncio lo hizo, aquí, el secretario del ramo, Enrique Martínez y Martínez, al inaugurar los trabajos del “Foro regional de consulta de vocación territorial: hortofrutícola”, como parte de ese proyecto de revolución agropecuaria nacional.
Desde siempre se ha dicho que México tiene vocación forestal, no agrícola y, mucho menos, pecuaria, aunque bajo la premisa de lograr la autosuficiencia alimentaria, durante década le apostó a la siembra de cereales.
Alinea Sagarpa cultivos de cereales con frutas y hortalizas.
Esa vocación forestal se clarificó con la firma del Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (Tlcan) cuando México fincó sus expectativas en sus ventajas competitivas agropecuarias, que privilegió los cultivos hortofrutícolas sobre los cereales, cuyos cultivos de maíz (cultivo tradicional y ancestral), trigo, arroz, avena, sorgo y algunas oleaginosas, no arrojaron los resultados pretendidos de autosuficiencia alimentaria.
“La actividad hortofrutícola es el destino de México y con el direccionamiento de mejores políticas públicas somos y vamos hacer una potencia mundial, aprovecharemos la biodiversidad, agroclimas y recursos naturales con los que cuenta el país”, aseguró Martínez y Martínez.
Destacó que México es el primer lugar en producción y exportación de aguacate, mango y berries, y el segundo en jitomate y nuez, entre otros productos, con un valor de la producción cercano al 25 por ciento del total de los bienes agrícolas y una superficie que abarca el 3.2 por ciento del territorio cultivable.
La producción de hortalizas y frutas generan mayores empleos por hectárea en cultivo, como es el caso del aguacate y las berries, con un valor comercial muy importante para Michoacán y el país, expuso.
“El cuerno de la abundancia para México está en las frutas y hortalizas”, refirió. Explicó que se seguirá produciendo maíz, arroz y soya, a efecto de disminuir importaciones “pero que quede muy claro que ahí no se tienen las condiciones para ser una potencia mundial”.
La Sagarpa contempla que para agosto próximo se construya un Acuerdo Marco para la Transformación del Campo.
Para ser un país agrícola o ganadero se requiere de vastas extensiones y planicies donde desarrollar estas actividades primarias; México no las tiene.
El éxito de la Unión Nacional de Productores de Hortalizas (ahora incluida dentro de la Confederación de Asociaciones Agrícolas del Estado de Sinaloa =Caades), estuvo, precisamente, en apoyo a frutas y verduras.
Mientras que la actividad pecuaria está distorsionada. Los estados más dinámicos en este ramo son los norteño que, curiosamente son los que menos tienen criaderos.
Ideológicamente, México es cuna del maíz, a partir de la domesticación del teocitle. Su principal producto de consumo popular es la tortilla, cuyo primer arponazo lo dieron las recientes generaciones que, por razones de estética, dejaron de consumirla “para no engordar”.
Un reporte de esos tiempos de Maseca daba cuenta de una caída en el consumo de tortilla de alrededor del 5 por ciento, a nivel nacional.
El reconocimiento mundial a la comida mexicana trajo una relativa revaloración de la tortilla, al ubicarla en la cocina tradicional y en los merenderos exclusivos donde se sirven taquitos, tostadas, sopesitos, chalupas y otras delicias del maíz, pero en tamaño miniatura, tipo gourmet.
En plena época futbolera abundan las botanas, pero sólo las palomitas de maíz son de este cereal; el resto es harina industrializada.
En cambio, el mercado se ha volcado a magnificar las virtudes y bondades de frutas y verduras. Ahora lo hace por razones de salud cuando México presenta un alto índice de obesidad en todas las edades de su población.
Sector primario mantiene crecimiento durante abril
El Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) para las actividades primarias reportó un crecimiento de 1.3 por ciento en su comparativo anual durante abril pasado.
El IGAE, elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), indicó también que, de acuerdo a cifras desestacionalizadas, las actividades primarias se mantuvieron similares al mes previo.
Con cifras preliminares de la Secretaría de la SAGARPA, INEGI detalló que el incremento reportado se originó por un mayor dinamismo del sector agrícola.
Entre los productos que registraron aumentos se encuentran: trigo en grano, tomate rojo, frijol, maíz forrajero, chile verde, cebolla, limón, avena forrajera, café cereza, caña de azúcar y papa.
Durante marzo pasado se registró un crecimiento del IGAE para las actividades primarias de 7.1 por ciento en su comparativo anual (marzo de 2013).
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