Ciudadanía y gobierno
Ocho personas muertas es demasiado precio para dialogar; los mismos 8 muertos los usan, también es recriminable, para imponer el dialogo y marcar los temas de la agenda. Es muy lamentable, pero sin muertos seguiría la obsesión destructiva y de daños a la ciudadanía, de la CNTE. Y sin los ocho muertos se mantendría la política gubernamental dura sobre educación. ¿Quiénes son los 8 muertos? Son desconocidos. No son maestros de la Coordinadora. No son policías. Son ciudadanos aliados a maestros subversivos, que murieron en el enfrentamiento de Nochixtlán. La crónica del desaojo de Nochixtlán es bien conocida. Los ocho muertos reunió al Secretario de Gobernación, Miguel Angel Osorio Chong, al subsecretario Luis Miranda y el asesor Guillermo Lerdo de Tejada; de la CNTE fueron unos 30. Al final, el miércoles 23 de junio, Osorio Chong informó que seguirá el diálogo. Y de los maestros dijeron que no aceptan la Reforma Educativa. Los ocho cambiaron el camino.
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