De visita por México, Benoît Battistelli, presidente de la Oficina Europea de Patentes (EPO por sus siglas en inglés), acordó con el director general del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), Miguel Ángel Margáin, reforzar la cooperación bilateral en materia de patentes y apoyo a la innovación.
Debido a que las compañías europeas se encuentran entre los usuarios más activos del sistema de patentes en México, representando una parte considerable de las solicitudes de patente en México.
El presidente de la EPO agregó que el número de empresas mexicanas que presentan patentes en Europa sigue siendo bajo, pero va en aumento. Basándonos en nuestro acuerdo de cooperación, firmado el pasado mes de septiembre, apoyaremos al IMPI en sus esfuerzos por mejorar sus servicios a los inventores y empresas innovadoras en México. La EPO quiere compartir con el IMPI su experiencia, que es reconocida a nivel mundial, en el desarrollo de servicios de calidad en el tema de patentes.
Durante su estancia, el titular de la EPO también se reunió con el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, así como con representantes de las industrias mexicanas y europeas, y funcionarios de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), a fin de compartir puntos de vista sobre sus necesidades y la manera de mejorar el sistema de patentamiento.
«Estos encuentros marcan una nueva etapa en las relaciones entre la EPO y México encaminadas a fomentar la protección de la propiedad intelectual en las dos regiones», dijo Benoît Battistelli.
Miguel Ángel Margáin, director general del IMPI, afirmó que la Oficina Europea de Patentes es un aliado estratégico de México que ayudará a cumplir con el compromiso nacional de aumentar el número de patentes solicitadas por mexicanos.
Con este tipo de actividades el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial reitera su voluntad de fortalecer la cooperación con las oficinas de propiedad intelectual en todo el mundo, a fin de modernizar, formal e instrumentalmente, los programas de gestión de la propiedad industrial y dar seguridad jurídica a la protección de patentes, agregó Miguel Ángel Margáin.
El eje central de cooperación entre la EPO y el IMPI será compartir mejores prácticas en el procedimiento de concesión de patentes, creación de capacidad, información sobre patentamiento y soluciones de Tecnologías de la Información (TI).
La cooperación de la EPO con nuestra oficina de propiedad industrial se remonta a 1990, cuando el organismo europeo comenzó a proporcionar conocimientos especializados a México para desarrollar su procedimiento de concesión de patentes.
Desde entonces se han firmado varios acuerdos bilaterales; el más reciente, signado en septiembre de 2013.
Cabe mencionar que la Oficina Europea de Patentes es la máxima autoridad en la materia en aquel continente. Funge como oficina regional en 38 estados miembros, que incluye a todos los países de la Unión Europea, además de Noruega, Suiza, Turquía y otras naciones del sudeste europeo.
Las cifras de presentación de solicitudes de patentes en 2013 eran de más de 265 mil, o sea, un crecimiento de 2.8 por ciento en relación con el año anterior.
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