Estás a punto de descubrir tu nuevo lugar favorito: la Azotea de Barrio, restaurante ubicado en Barrio Alameda –inmueble rehabilitado estilo Art Déco, localizado a un costado de la Alameda Central. El chef a cargo de este spot culinario es Misael Moreno Castro quien comparte con los comensales deliciosas propuestas que fusionan sabor y frescos ingredientes, y que en esta ocasión dejó por unas horas la cocina para liderar el Rincón Gastronómico organizado por la Central de Abasto.
Para acercar a más personas a la oferta de productos provenientes de todo México y de más de 15 países, la Central de Abasto lleva a cabo recorridos mensuales guiados por distintos chefs. Esto bajo el concepto de “Rincón Gastronómico”.
En esta ocasión, el chef invitado fue Misael Moreno, quien desde temprana hora se alistó para ir en busca del #IngredienteCentral para realizar la comida especial de cuatro tiempos que se serviría en la Azotea de Barrio.
El Rincón Gastronómico inició entre montañas de verduras, coloridas cajas llenas de frutas, frescas legumbres y otros miles de productos, incluido un caleidoscopio de aromáticas flores. Caminar por los pasillos de la CEDA se convirtió en una experiencia sensorial que invitó a todos llevarse un pedacito de México a sus hogares o negocios.
Es innegable la frescura y calidad de los insumos que con delicadeza eligen los chefs, quienes en cada Rincón Gastronómico dejan a todos los invitados con la curiosidad de descubrir los platillos que serán creados, y esta visita no fue la excepción.
La bolsa de “mandado” del chef Misael Moreno Castro incluyó ingredientes como lentejas, jitomates, cebollas, sandía, albahaca, queso fresco, plátanos machos, carne molida de pollo, pimientos, poro, brote de betabel, manzanas verdes, fresas y canela.
Luego del recorrido por el mercado más grande del del mundo, el chef y sus invitados se trasladaron a Barrio Alameda, en donde fueron recibidos con una Cerveza Colectiva. De inmediato, el chef y sous-chef se dirigieron a la cocina de la Azotea de Barrio para comenzar la magia.
Potaje de lentejas fue el primer tiempo. “Nos inspiramos en algo clásico, algo que sabe a casa, a lo que te hacía tu mamá cuando eras chiquito pero con nuestro toque” explicó Misael. El cilantro otorgó un delicado aroma a la sopa, mientras la combinación de plátano macho con tocino dieron un toque extra de dulzor y sabor que agradeció el paladar.
El segundo tiempo fue Ensalada de sandía: dos cubos de esta fruta al grill con un trozo de queso fresco, una hoja de albahaca y una cama de germen de trigo. “No es una ensalada convencional, no hay lechuga, ni lo que se acostumbra ver cuando te sirven una ensalada y todo se fusiona con el aderezo de miel con chipotle”, confesó el chef.
El plato fuerte fue un delicioso albondigón de pollo relleno de pimientos. Fue servido sobre una tabla de madera que lució una tersa salsa cremosa que, en palabras del chef es una explosión de sabor de hierbas y verduras. Espinacas, poro, brote de betabel y rábano acompañaron a un costado.
El postre consagró el menú especial: Tarta de manzana. La base de la tarta fueron galletas. Se utilizaron manzanas verdes las cuales desprendieron su jugo al hervirse con dulces rodajas de canela; en tanto, la acidez provino de las finas rodajas de fresas que se posaron sobre la cubierta de la tarta.
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