Benito Taibo, considerado uno de la autores de obras para jóvenes de los más aceptados por este grupo poblacional, presenta su nueva obra, “Cómplices”, en donde aparecen ella, él, tú, yo, ellos y también nosotros, los lectores detrás de cada uno de estos pronombres. Los que tejen esta historia donde aparecen ágiles espadachines, monjes detectives, replicantes muy humanos y niños perdidos en islas desiertas son Julián e Isa, dos chicos totalmente diferentes en apariencia, pero de condiciones similares ante la adversidad.
Por su parte, Isa no se detendrá hasta encontrar en distintos títulos a las heroínas de la literatura que le ayuden a demostrar que para celebrar sus quince años no es necesario llevar una dieta rigurosa para ponerse un vestido que jamás volverá a usar.
En entrevista con este autor comentó que esta novela tiene que ver más con los lectores que con los libros, ya que detrás de un libro hay un lector, no sólo el escritor, afirma su autor, y mencionó que en la actualidad “se está leyendo mucho más que nunca y, en gran medida, se debe a los booktubers y a los bloggers, estos chicos que con un total desparpajo se ponen frente a una cámara y dicen ‘yo leí este libro y me gustó por esto, tú decide lo que quieres’”.
Explicó que está historia es de las maneras de leer y como salvan a las personas y homenajear a las personas cuyas pequeñas historias de alguna forma o no nos vemos reflejados. Ya que existen más formas de lectura que libros, pues cada persona es un universo.
También agradeció a los jóvenes que se le acercan y le comentan del impacto de revisar sus páginas; siendo un sector más feroz crítico y mejores lectores que se les trata de mantener amarrados a las páginas con hilos conductores muy fuertes; la creación de lectura para jóvenes tiene que ser una telaraña que aguante cien elefantes. “Es un trabajo maravilloso y me la paso maravillosamente”.
La lectura añade que es uno de los goces más baratos y más gratificantes. El libro tiene tantas lecturas como lectores, por lo tanto, no homogeniza sino al contrario. No hay nada más peligroso, desde mi punto de vista, que un lector y por eso no quieren –la autoridad- que seamos seres lectores.
Indicó que lo primero que soy es un lector y así me asumo y me considero u lector antes que nada lo cual estimó permite que los jóvenes no me vean como un viejito de cincuenta y tantos años.
“No soy rock star, ni poseedor de una verdad, vierto mus experiencias en páginas, pero los personajes los cuales redactó son ficcionales y la maravilla de la literatura convierte a alguien en un ser arquetípico que son elementos morales de diversas culturas”, dijo.
Enfatizó que este es un libro que habla sobre la lectura, también habla sobre el amor que existe entre los libros y las personas. En donde cada uno de estos dos protagonistas, están en su mente y cuerpo en mundos diferentes, el caso de Julián que lucha contra el aburrimiento de todas las maneras posibles. Desde que le diagnosticaron hepatitis, ha recreado en su cabeza conversaciones imaginarias entre ostras que no tienen nada que hacer, ha buscado formas fantasiosas en las manchas de la pared e incluso ha lanzado mocos al aire. Se declara feliz porque no tiene que ir a la escuela, lo cual significa que, por nada del mundo, se acercará a los libros.
La intención de este libro es un salvamento para tener una almohada con mejores sueños y ser escudo contra la vanidad y la lanza e defensa de lo que nos abruma y nos destruye, de esto se trata, que leer es resistir y encontrar una salvación a la persona, concluyó.
Benito Taibo, es periodista y poeta, que entre su prolífera obra destacan los libros: Vivos y suicidas (1978), Recetas para el desastre (1987) y De la función social de las gitanas (2002); Persona normal (Destino, 2011; Booket, 2012), Querido Escorpión (Planeta, 2013), Desde mi muro (Planeta, 2014), etc.
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