El Águila Real el símbolo de la cosmogonía mexicana, es motivo de una exposición fotográfica abierta al público en la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), la cual da cuenta de cómo se ha recurrido a su imagen a lo largo de la historia nacional, hasta consolidarla como emblema patrio.
Bajo el título Águila real, símbolo vivo de México, la muestra organizada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) está integrada por 53 imágenes en diferentes formatos.
Al respecto, Hildegard Rohde Aznar, de la dirección de Exposiciones, de la Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones del INAH, dijo que “el objetivo es exponer cómo, a través del tiempo, esta ave ha sido la imagen que nos ha dado identidad como país, su interpretación desde la época prehispánica hasta nuestros días, y su adaptación visual y gráfica en distintos emblemas”.
La coordinadora de la muestra detalló que sobre este símbolo mítico y cultural, que vincula el patrimonio histórico con el natural, en el montaje fotográfico se pueden apreciar imágenes del águila en su hábitat y su representación gráfica en códices como el Mendoza o en el mural del Palacio de la Zona Arqueológica de Cacaxtla, en Tlaxcala, entre otras.
Para mostrar la magnificencia del ave, en la Sala de Exhibiciones del AICM se colocaron pendones con imágenes de esta especie en pleno vuelo. Además se instalaron cuatro pantallas donde se proyectan videos que explican las características particulares del águila real, además de mostrarla en su entorno natural. También se exhiben las diversas transformaciones que ha tenido su figura a través de distintas manifestaciones artísticas.
Dividida en siete líneas temáticas, la muestra fotográfica abre con el apartado Descubriendo al águila real, donde se abordan sus características físicas y las particularidades que la hacen una raza excepcional, gracias a su aguda visión y a su destreza en el vuelo de planeo cuando cazan una presa.
Le sigue el núcleo temático Nace un mito, que muestra cómo las culturas mesoamericanas concebían al águila dentro de su cosmogonía, por ejemplo, en el mito de la Fundación de México-Tenochtitlan. A partir de tal concepción, este ícono se representó en diversos objetos de uso cotidiano hasta llegar a la imagen de los guerreros águila, que significaba uno de los rangos más altos de la jerarquía militar entre los mexicas.
Prosigue Lecturas de una historia, donde se analiza cómo ha sido visto este símbolo a lo largo de la historia; en el México Independiente, en 1811, el águila real fue usada por primera vez en una bandera, por José María Morelos y Pavón.
Entorno y Patrimonio hace un comparativo entre el patrimonio histórico y el natural, y cómo se han conservado ambos hasta la actualidad.
En el apartado Maestra de vuelo se destaca el arte volátil del ave, que planea antes de descender sobre una presa, las características de su trayectoria en el aire y sus cualidades al elevarse, entre otras particularidades.
Las imágenes icónicas de este tipo de águila en el imaginario colectivo son destacadas en el apartado Presencia en la cultura popular.
Para concluir, la exposición cierra con el tema Rescate del símbolo vivo, “donde se busca generar conciencia sobre lo importante de conservar esta especie”, refirió Hildegard Rohde Aznar.
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