Henkel, empresa global de bienes de consumo e industriales, llevó a cabo acciones de reforestación en algunas localidades de este estado. Para ello, extendió la invitación a los miembros de su equipo interno de trabajo, logrando así, contribuir a la mitigación del cambio climático de forma significativa, creando a la vez, conciencia del impacto que causan los procesos y acciones del día a día.
De acuerdo con la definición establecida por la Organización Meteorológica Mundial (OMM), la capa de ozono funge como un protector natural, salvaguardando a los seres vivos de los rayos nocivos emitidos por el sol. Sin ésta, los humanos, animales y plantas se expondrían a la radiación ultravioleta 70 veces más a la que reciben normalmente, trayendo consecuencias en su salud. De igual modo, contribuye a la regulación de las variaciones de las corrientes oceánicas o bien, las masas de aire.
Sin embargo, como resultado tanto de las actividades cotidianas, como las de las compañías a nivel mundial, este filtro de la Tierra se ha visto significativamente afectado, despertando, desde el siglo XX, la preocupación de los científicos. Ante esto, se han establecido diferentes iniciativas, campañas y alianzas para detener la emisión de gases dañinos; por ejemplo, el Protocolo de Montreal que entró en vigor el 1º de enero de 1989 y actualmente, representa uno de los acuerdos internacionales más importantes con respecto al medioambiente.
Por otro lado, es tarea de agentes externos apoyar y unirse a la lucha para a la regeneración del planeta. En este sentido, la reforestación es una práctica clave y esencial, ya que, con ayuda de la fotosíntesis, limpia el aire, eliminando un gran porcentaje del dióxido de carbono, así como otros elementos químicos dañinos. Asimismo, según datos brindados por diferentes plataformas digitales, un árbol de treinta metros en su edad madura produce aproximadamente 2,721 kilogramos de oxígeno; es decir, lo suficiente para que dos personas respiren durante un año.
Por lo anterior, como parte del Marco de Ambición de Sustentabilidad 2030+ y en línea con el departamento de Medio Ambiente Municipal de Salamanca, se asignaron a Henkel áreas clave, tales como parques, camellones, escuelas y zonas habitacionales con el fin de plantar un total de 1,295 árboles de distintas especies: fraile, fresno, palo dulce y pata de vaca.
“El fomentar y poner en práctica programas en favor del medioambiente es muy gratificante, ya que, de esta manera, regresamos a nuestro planeta un poco de los recursos que nos brinda diariamente. En Henkel, siempre hemos estado comprometidos con la sustentabilidad, así como con la responsabilidad de impactar positivamente en las sociedades donde estamos presentes; por ello, desde nuestra planta en Salamanca, continuaremos contribuyendo al desarrollo del municipio para un mejor futuro”, comentó Marco Márquez, gerente de la planta de adhesivos en Salamanca de Henkel.
La compañía continuará trabajando en sus objetivos, focalizándose en ayudar a comunidades en pro de su prosperidad, además de ser un socio de confianza mediante sus tecnologías e innovaciones dentro de su portafolio.
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