Con la llegada de 2017 y ante los malos pronósticos que los medios de comunicación, expertos en temas financieros y políticos auguran para este año, algunas empresas han comenzado a actuar y a recortar presupuestos en diferentes áreas, con el fin de prevenir una crisis económica que afecte a sus compañías.
Siendo el departamento de mercadotecnia, uno de los más castigados, y las campañas publicitarias en las que aplican la afectación de presupuesto, ocasionan, a su vez, una disminución de presencia mediática, la cual no debería perderse para continuar fidelizando con sus clientes actuales.
Al respecto, Ignacio Serna, CEO de Serna PR, declaró que ante esta situación, pocas empresas se detienen a analizar y valorar las áreas en las que, realmente, se requiere seguir invirtiendo, sobre todo en época de crisis. Una de ellas es la de relaciones públicas (RP), por ser la encargada de promover, posicionar, y dar prestigio a una marca entre los clientes y que se percibe como una inversión inteligente ya que representa presencia en medios de comunicación masiva a través de apoyo en contenidos, por medio de una inversión realmente conservadora vs un presupuesto publicitario, que suele ser elevado.
Explicó que “hoy en día hay empresas que se reúsan a contratar a una agencia de relaciones públicas por desconocer el gran impacto y los beneficios que pueden alcanzar con una buena estrategia en medios de comunicación; por el contrario, invierten gran parte de su presupuesto en costosas campañas publicitarias, que si bien son elementales, siempre requerirán ser complementadas con el trabajo de un publirrelacionista”.
Y agregó que “siempre recomendamos a los corporativos, marcas y toda empresa, por pequeña que sea, contar con una agencia de RP que ayude a tener el acercamiento con medios de comunicación y a generar una buena relación con ellos, pues esto, al final del día, les permitirá que lleguen a los consumidores que buscan y hará que se ascienda de forma rápida y eficaz”
Una agencia de RP ayudará a detectar los aciertos de una empresa y con base en ello, a generar estrategias que ayuden a construir una marca más fuerte y sólida, preparada para salir a flote ante cualquier adversidad.
Esto no significa dejar de invertir en publicidad, pero sí destinar un presupuesto menor a ésta, para complementarla de forma acertada con una buena estrategia de RP en la que se amplíe la información de una marca y se logre llegar a más clientes potenciales.
Para ello, es importante conocer la diferencia entre publicidad y relaciones públicas: en publicidad, el principal objetivo es vender el producto a través de un anuncio concreto, en un espacio específico y con costos muy elevados; en relaciones públicas, se busca explicar de forma detallada de qué trata la marca, producto o servicio, para que el cliente conozca desde raíz lo que consumirá.
A diferencia de la publicidad, no se tiene destinado un espacio específico para publicar la información, además de que el costo por una campaña de RP es mucho menor, accesible para cualquier negocio, por pequeño que éste sea.
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