El 6 de noviembre de 1810, al despuntar nuevo día, Don Miguel Hidalgo y Costilla, a la sombra de un encino (Quercus obtusata), ubicado en el paraje de Toptolmaloya, en el actual municipio de Aculco, realizó un acto religioso.
La tradición oral habla de celebrar una misa, pero los datos históricos sólo refieren que se trató de un acto religioso, consistente en elevar oraciones hacia el Creador, acto al cual se sumaron los 40 mil milicianos que le seguían.
El acto religioso, tal vez un maitines, sirvió para implorar a Dios ayuda y reanimar espiritualmente a su tropa, pues horas más tarde enfrentaría a las fuerzas realistas en el cerro de Tixhiñú, a poca distancia de Aculco.
Ese hecho histórico se mantuvo en la memoria de los mexiquenses, quienes honran al encino, al que denominan “Palo Santo”, por ser testigo presencial del ánimo de Hidalgo y de sus ansias de libertad para México.
Ahora, a 200 años de la Independencia nacional y a 317 ó 325 del nacimiento de este encino, la Protectora de Bosques del Estado de México (Probosque), bajo la dirección de Jorge Rescala Pérez, recrea ese ejemplar forestal y los 300 retoños obtenidos los distribuyó en todos los municipios de la entidad, como recuerdo viviente de la libertad nacional.
Los estudios dendrocronológicos del encino los realizó José Villanueva Díaz, del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales y Agropecuarias (Inifap), de Gómez Palacios, Dgo.
El estudio no fue sencillo pues se trataba de conservar al árbol e infligirle el menor daño posible, al mismo tiempo que se determinaban con precisión todas sus características botánicas.
El encino, que ahora está en posición inclinada, a causa de un fuerte ventarrón que lo sacudió hace 8 años y mantiene 50 por ciento de sus raíces expuestas, pero aún está vivo y con amplias posibilidades de sobrevivencia, debido a un proceso de rescate por parte de Probosque.
Este proceso incluyó saneamiento contra parásitos, contrarrestar los huecos provocados por las hormigas y podarlo para distribuir mejor los nutrientes que absorben sus raíces.
Comentarios Cerrados