Veracruz

El sábado pasado, a las 18:00 horas, ocurrió un incendio y fuga de amoniaco en el recinto portuario de Veracruz. La nube tóxica, consecuencia del evento, se extendió a la zona turística de la ciudad. No hubo desgracias personales. El siniestro fue controlado oportunamente. Ranulfo Márquez, secretario de Protección Civil estatal estuvo pendiente del fenómeno hasta la disolución de la nube.

El secretario de Protección Civil informó: las medidas tomadas por el Consejo Estatal de Protección Civil garantizaron la seguridad de las personas durante la emergencia. 

Rafael Hinojosa Moreno, con residencia en la ciudad de Veracruz y prestigiado abogado, experto en contratos en comercio internacional, por eso sabe del movimiento de sustancias químicas, comentó que las autoridades municipales, estatales y federales actuaron con eficacia. 

Seguridad Pública y Tránsito, municipales; Bomberos de Veracruz y Bomberos conurbado, éste bajo la coordinación de Antonio Chedraui Bolado, presidente del patronato que lo anima; Armada, Ejército, Capitanía de Puerto, se aplicaron oportunamente ante la situación. 

Chedraui Bolado declaró a Elia Melchi, reportera de Notiver, el diario local de mayor circulación:

«…tuvimos miedo, no sabíamos qué enfrentábamos, qué químicos había. Qué bueno que pasó dentro del puerto. Hubo reacción rápida y poca gente». 

Pregunta Elia: ¿Estamos en buenas manos? «Sí. Se cumplió y bien. La gente hizo un trabajo excelente. Si vamos a retroalimentarnos para saber qué haríamos si nos volvieran a ocurrir eventos como éste, lo sucedido sirve como autoaprendizaje. Hay detalles que mejorar. Hubo mucha calma. Eso contó mucho. No había otra manera de pararlo. Lo acontecido no tuvo consecuencias mayores. Nos ayudó, un poco, que los transportistas hayan prestado camiones; que las televisoras y estaciones de radio hayan apoyado. Fue una buena experiencia. Para que el día de mañana no haya una cosa peor».

La capacidad de Veracruz y zona conurbada para actuar en casos de desastre, ahora del tipo socio organizativo, se ha desarrollado desde hace tiempo. Desde la gestión de don Fernando Gutiérrez Barrios como gobernador del Estado y la de Efrén López Meza, como alcalde de Veracruz. Desde entonces se ha puesto atención a estas cuestiones tan importantes para la protección de la comunidad.

Rafael Hinojosa, quien fue síndico del ayuntamiento porteño en la administración encabezada por López Meza, recuerda la tenaz insistencia de Francisco Pulgarón, regidor a cargo de protección civil, entonces, y en lo cual él participó, para determinar los atlas de riesgos locales. Entre los puntos críticos se ubicaba al puerto y a sus operaciones. Particularmente en el caso de productos de alta peligrosidad, transportados por barco, ferrocarril y auto transporte carretero. En la tarea contaban con la asistencia de Julio Oropeza, en aquellos tiempos jefe del cuerpo de bomberos y un estudioso aplicado de sustancias químicas y sus riesgos y tratamiento.

La capacitación en Veracruz, para enfrentar desastres es permanente. Recordemos que, independientemente de su condición costera, el núcleo eléctrico de Laguna Verde está relativamente cerca. Por ello entidades gubernamentales, bajo la coordinación del personal especializado de aquella planta, han puesto atención a las previsiones del Programa de Emergencia Radiológica Externa (PERE). Autoridades y comunidad están obligadas a prever la posibilidad de ocurrencia de cualquier tipo de eventualidades de riesgo.

Fidel Herrera, gobernador del estado, Jon Rementería, alcalde porteño, pueden sentirse satisfechos de la capacidad mostrada por la comunidad, los funcionarios y sus áreas operativas, para enfrentar accidentes como el del sábado anterior.