ATISBOS

Un precario presupuesto limitaría la calidad de la educación superior

Rafael Cienfuegos Calderón

EXCLUSIÓN.- La  educación superior ya es obligatoria y gratuita (las leyes reglamentarias de la reforma educativa así lo establecen y la Constitución lo  mandata) con lo que el gobierno federal da la garantía de que nadie que desee estudiar una carrera en las instituciones públicas nacionales y estatales será excluido ni tendrá que pagar cuota de inscripción ni nada. Pero ¿y el dinero para que operen los institutos, las  universidades y tecnológicos? En la propuesta de Presupuesto de Egresos de la Federación 2020, que está por analizarse en la Cámara de Diputados, el gobierno del cambio no incluye un presupuesto adicional para que las instituciones de educación superior cubran el costo del incremento ilimitado de la matrícula y el subsidio de la permanencia de cada alumno, así como para mejorar y ampliar la infraestructura, y contratar académicos bien preparados para ofrecer una educación de calidad. “Una precaria asignación presupuestal a las universidades no dejaría margen para atender en el futuro la cambiante composición social de la matrícula y el mejoramiento de la calidad educativa”, planteó en un análisis publicado en Nexos, el doctor Rodolfo Tuirán (fallecido el 1 de septiembre de 2019), subsecretario de Educación Superior (2006-2012); y subsecretario de Educación Media Superior (2012-2018) de la SEP. Con base en experiencias previas, hizo hincapié, el riesgo siempre latente es que, de ser aprobada y elevarse a rango constitucional, la gratuidad y obligatoriedad  de la educación superior se conviertan en letra muerta. En su análisis planteó que si el mandato de obligatoriedad implica alcanzar una cobertura de al menos 56% en 2024 (con una matrícula de 6 millones 122 mil estudiantes) y de 70% en 2030 (con 7 millones 580 mil alumnos), en tanto que el de gratuidad eliminar cuotas y colegiaturas, el presupuesto promedio por año tendrá que incrementarse  en 11 mil 648 millones de pesos durante 2019-2024, y en 10 mil 241 millones en 2025-2030. En su opinión, no se trata sólo de aumentar la matrícula, sino evitar que la masificación redunde en una oferta educativa de baja calidad. En particular, se requiere evitar que las instituciones educativas respondan improvisadamente a esta demanda. La Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior planteó ante diputados que para cumplir de manera gradual con la obligatoriedad y gratuidad, es necesario garantizar en el Presupuesto de Egresos 2020, 17 mil 322 millones de pesos, de los que 7 mil 678 se podrían obtener de los impuestos federales, derechos de minería e ingresos del Fondo Mexicano del Petróleo, y que no están contemplados en el proyecto de presupuesto los mil 443 millones de pesos que con oportunidad fueron solicitados para atender el rubro de salarios. El rector Enrique Graue reclamó que si bien se ha mantenido el presupuesto para la UNAM, el de desarrollo de ciencia y tecnología se ha reducido e indicó que la expansión de la matrícula continuará si y sólo si existe el financiamiento específico para ello.

REPARTO.– Para las Instituciones Federales de Educación Superior el Proyecto de Presupuesto de Egresos 2019 asciende a 111.8 mil millones de pesos, de los que para la  Universidad Nacional Autónoma de México son 37,277.4; para el Instituto Politécnico Nacional, 16,181.1; para la Universidad Autónoma Metropolitana, 6,738.5; para el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional, 2,203.2; para la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro, 920.6; para la Universidad Pedagógica Nacional, 801.7; para el Colegio de México, A.C. 554.3; y para la Universidad Abierta y a Distancia de México, 193.8.

DESMARQUE.- Dada la desintegración que se está dando en el movimiento-partido Morena por la lucha del poder por el poder y el control de la dirigencia nacional -en el supuesto de que en algún momento haya habido cohesión de sus integrantes provenientes de las tribus del PRD, de arribistas del PAN y el PT, y de organizaciones y grupos políticamente disímbolos- ¿al Presidente de la República, su fundador, le servirá para alcanzar los objetivos que se ha planteado a través de la Cuarta Transformación? ¿Será que no y por ello se mantiene al margen? ¿Lo dejará? Como advirtió.

DIAGNÓSTICO.- México es un país con más de 50 millones de pobres y casi 10 millones de personas en pobreza extrema; una nación donde sólo 27.4 millones se considera no pobres, uno de cada cinco habitantes. María Luisa Albores González, secretaria de Bienestar presentó este diagnóstico ante los integrantes de la Cámara de Diputados, a quienes dijo que en conclusión “esto quiere decir que casi cien millones de personas en México se encuentran en una situación de pobreza o presentan carencias sociales o de ingreso”.