Opinión

ATISBOS

Aborto: problema de salud e inseguridad que se elude

Rafael Cienfuegos Calderón

De la voluntad política del jefe del Estado mexicano y de los diputados y senadores, no de una consulta ciudadana, depende  modificar la Constitución para garantizar a las mujeres el derecho a decidir sobre su vida reproductiva, despenalizar el aborto y legalizar su práctica para que quienes recurren a él lo hagan en condiciones seguras. La consulta que se propone es una salida fácil a problemas complejos de salud e inseguridad, como la suspensión de miles de embarazos en lugares inadecuados y sin higiene y la violencia sexual contra las mujeres. Al respecto Estefanía Veloz -abogada y feminista- expuso (El Universal 20-01-21) que México es el país con más embarazos adolescentes en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) por la falta de educación sexual, la prevalencia del abuso sexual y los matrimonios infantiles, lo que hace que la propuesta de consultar la despenalización quede como una banalización. Cuando se trata de un tema de salud, el Estado debe tomar la decisión, aunque ésta fuera impopular, para resolverlo. Sin conocer cuál sería la pregunta y suponiendo que la Suprema Corte de Justicia permita que se consulte el derecho a decidir, (afirma) ésta sería una batalla perdida de antemano, pues no sería una consulta ni equitativa ni justa. Ruth Zavaleta -expresidenta de la Cámara de Diputados- recordó (El Universal 08-01-21) que cuando el presidente habló de someter a consulta el aborto luego de que en Argentina se despenalizó, un grupo de legisladoras de Morena emitió un comunicado para informar que la Cámara de Diputados realizó foros y parlamentos abiertos y los promovió en más de 22 entidades, y que contaban con avances para legislar la despenalización del aborto y evitar muertes, y que el Estado garantice a las mexicanas “la libertad, la gratuidad, la seguridad, el derecho a decidir y a no ser criminalizadas en el ejercicio de este derecho”. En el comunicado las legisladoras dicen estar de acuerdo en que el tema no es de iglesias ni poderes, sino de mujeres y que ellas, como sus representantes trabajarían para que el aborto legal y seguro fuera ley en todo el país. Sin embargo, expone Zavaleta, en la Cámara de Diputados sólo hay tres iniciativas del PAN para reformar la Constitución, pero no para despenalizar, sino todo lo contrario. Establecen garantizar el derecho a la vida de todo ser humano, desde el momento de la fecundación.

 

 

 

Acerca de Juan Carlos Machorro

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