ATISBOS

En todo hay, en esta temporada, politiquería

Rafael Cienfuegos

México está en etapa preelectoral y a partir de abril los partidos y sus candidatos a gobernador en 15 estados, a presidentes municipales, alcaldes, regidores y congresos locales en 31 entidades y Ciudad de México, y a la Cámara de Diputados federal, bombardearán a la población con campañas políticas que es seguro estarán plagadas de falsas promesas, descalificaciones, insultos y denuncias, como ha ocurrido en anteriores elecciones, que lejos de interesar  desaniman y en vez de promover el voto lo inhibirán. La politiquería estará a todo lo que da. En todo hay, en esta temporada, politiquería, dijo el Presidente en la mañanera del martes 23 antes de firmar el  Acuerdo Nacional por la Democracia con gobernadoras y gobernadores para que nadie interfiera en el proceso electoral con recursos públicos, sea limpio y equitativo, y para que se evite el fraude. Lo que implica dicho acuerdo no es nuevo y resulta inútil ya que los delitos y las normas de las elecciones están contenidas en diversas leyes vigentes, en tanto que el Presidente y los invitados a Palacio Nacional solo guardaron las formas, pues la relación con varios de ellos no es buena: politiquería. El acuerdo carece de legitimidad democrática porque el Instituto Nacional Electoral (INE), árbitro y responsable de la organización, desarrollo, fiscalización y calificación de las elecciones fue excluido por el Presidente dada la desconfianza que le tiene y porque quiere ser, como ya lo expresó, el vigilante y validador de las elecciones, aunque esa es, lo sabe, competencia exclusiva de la autoridad electoral y nadie la puede suplir: politiquería. Además, el acuerdo lo firmó el Presidente dos días después de que anunció, que en julio va a incrementar al doble la cantidad de dinero en efectivo que reparte a los adultos mayores y a bajar de 68 a 65 años la edad para ser beneficiario: politiquería. El martes 23, el Presidente no quiso opinar sobre la acusación de que Morena hace uso electoral de la vacuna, es un “debate que no conviene”. “No somos iguales, no traficamos con la necesidad de la gente”, “la vacuna es para todos”: politiquería. Antes, el 18 de diciembre de 2020, dijo ante la exigencia de los gobernadores de la Alianza Federalista de que se informe con claridad sobre la llegada de vacunas, su disposición, distribución y aplicación que la “vacuna no puede estar en manos de politiqueros”.