¿Fantasía versus realidad?
Rafael Cienfuegos Calderón
Con la Cuarta Transformación todo está cambiando en el país. Hasta la realidad se pretende suplantar con fantasías que solo en el País de las Maravillas se pueden concebir. Mientras 66.6% de la población de 18 años y más se siente insegura en la ciudad donde vive (Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, junio 2021, del INEGI) a causa de los delitos y violencia de todos los días, el acumulado de homicidios dolosos es de casi 100 mil (en mayo ocurrieron tres mil), y de enero a agosto el número de feminicidios aumentó 8% (en agosto fueron 107), la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez fue a la Cámara de Senadores a decir que a tres años de esta administración, “podemos afirmar que el Gobierno de México avanza en la construcción de la paz”, que la estrategia de “abrazos no balazos” es adecuada y que “la paz si se puede construir con más abrazos, cordialidad, civilidad y hermandad. A su decir el gobierno del cambio trabaja en erradicar las causas de la inseguridad, lejos de utilizar la fuerza pública, como se hacía en otros gobiernos, y todo lo que ocurre en el país en lo referente a la inseguridad pública (robos de toda índole, extorsión, homicidios dolosos, secuestro, trata de personas, feminicidios y acciones de la delincuencia organizada) se evalúan en el Gabinete de Seguridad todos los días, bajo el liderazgo del Presidente, donde se coordinan programas y acciones entre los gobiernos federal, estatal y municipal con el objetivo de regresar la paz a las comunidades y contribuir a preservar el orden público, la tranquilidad, y la paz. No obstante, el problema para el Presidente y la secretaria es que en realidad no hay ni seguridad ni protección ciudadana y los hechos rebaten el discurso oficial que carece de resultados positivos que lo sustenten. Claro está que si Rosa Icela Rodríguez compareció ante los senadores con motivo de la Glosa del tercer Informe de Gobierno, no va a hablar del nulo avance de la estrategia de seguridad que impulsa el Presidente y que en la práctica está a cargo de los secretarios de la Defensa y Marina, y no de ella. Pero también está claro que a la gente de a pie, al pueblo, no se le va a convencer de que todo está bien en cuanto a seguridad con palabrería, cuando es evidente que el número de víctimas del delito sigue al alza. La encuesta del INEGI revela además que la percepción de inseguridad sigue siendo mayor en las mujeres con 71.3%, mientras que en los hombres fue de 60.9%, y que a nivel nacional, 27.7% de los hogares contó con al menos una víctima de robo y/o extorsión entre enero y junio de 2021.
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