Una marcha más que desquicia al Presidente
Rafael Cienfuegos Calderón
Miles de mexicanos, de entre los millones que no le gustan al inquilino de Palacio Nacional porque no votaron por él ni pertenecen al “pueblo” que lo aclama y del que espera lealtad al votar el 2 de junio para que su partido gane la mayoría absoluta en el Congreso Legislativo, dejaron claro que no aceptan consignas, imposiciones ni autoritarismo de la Cuarta Transformación.
Esos miles de mexicanos apartidistas -700 mil o 90 mil- salieron el domingo (18-02-2024) a protestar por el peligro que corre la endeble democracia ante un gobernante que ejerciendo el poder absoluto desea -como un clasemediero aspirasionista de esos que repulsa- imponer y perpetuar su personal proyecto político que incluye solo al “pueblo”, no a todos los mexicanos.
La toma del Zócalo -lugar emblemático para el otrora político opositor- caló hondo en el ánimo del líder transformador que reaccionó iracundo descalificando, despreciando y ofendiendo a los miles de mexicanos que tomaron calles en la Ciudad de México y 60 ciudades más del país, actitud que secundado de inmediato, como es su costumbre, la candidata presidencial del oficialismo, Claudia Sheinbaum.
Los manifestantes rechazaron los embates contra la democracia, las reformas constitucionales para desaparecer las estructuras del Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), la imposición de consejeros y magistrados afines a la 4T votados por el “pueblo”, y la desaparición de legisladores plurinominales que favorecería al partido en el poder.
No le gustó que frente a las puertas del Palacio Nacional donde habita gritaran “narcopresidente” y expresaran inconformidad con sus políticas, acciones, decisiones y ocurrencias, con el atentado al Poder Judicial, y con la desaparición de los organismos autónomos que son con contrapeso al abuso de poder.
Por ello expresó en la mañanera del lunes que la democracia de ellos –los que marcharon en defensa de la democracia- es la de los ricos, la de los oligarcas, la democracia de los corruptos. Ellos fueron los que establecieron la antidemocracia con los fraudes electorales.
Añadió: que sea el pueblo el que elija a sus autoridades, porque antes eran los oligarcas, que lo que quieren es que las minorías elijan al presidente para seguir teniendo peleles, títeres.
El inventor de la Cuarta Transformación fue electo presidente en 2018 por 30 millones 113 mil 483 ciudadanos, empero 24 millones 860 mil 705 no le dieron el voto, como tampoco los abstencionistas, que fueron millones, pues de los 89 millones 250 mil 881 ciudadanos inscritos en el Padrón Electoral participaron 54 millones 974 mil 188.
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