Seis años más de reparto de dinero al “pueblo”
Rafael Cienfuegos Calderón
Sin una reforma fiscal para ampliar los ingresos gubernamentales vía impuestos y con un menor gasto del sector público para 2025, Claudia Shienbaum, que legalmente será la primera mujer Presidenta de México hasta el 1 de octubre, comprometió ya tres mil pesos bimestrales de pensión a un millón de mujeres de 60-64 años y a un millón de estudiantes de secundarias públicas durante el primer año de gobierno.
La meta del sexenio de la “continuidad con cambio” es incorporar a los programas sociales a seis millones de mujeres –primordialmente indígenas-y a la totalidad de los cinco millones 930 mil 627 estudiantes de la matrícula pública.
El compromiso para 2030 es sumar 14 millones 400 mil nuevas pensiones y becas a las casi 32 millones actuales-, mantener la cobertura universal e incluir la Pensión del Bienestar para Adultos Mayores en el artículo 4 de la Constitución para que sea un derecho, y aumentar anualmente el monto de acuerdo a la inflación.
Otro beneficio social -de reparto de dinero- es para personas mayores de 78 años con derecho a recibir por parte del Estado una pensión no contributiva en los términos que fije la ley. Y en el caso de indígenas y afromexicanas (os), esta prestación se otorgará a partir de los 75 años de edad.
Con la implementación de los nuevos programas sociales más la preservación de los creados por el primer gobierno del cambio y la transformación, Sheinbaum calcula que 7 millones de personas saldrán de la pobreza entre 2024 y 2030.
La incógnita es ¿de dónde va a salir el dinero?
Para el próximo año la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) prevé (Precriterios de Política Económica 2025 que entregó al Congreso de la Unión el 27 de marzo) que el gasto neto del sector público sea de 8 billones 663 mil millones de pesos, contra los 9 billones 143 mil millones de 2024.
De ese monto a la pensión de adultos mayores –el más importante de los 70 programas de política social que recibirían aumento- irían 482 mil 953 millones de pesos (mdp), 17 mil 904 millones más respeto al presupuesto de este año.
Para 10 de los programas prioritarios del gobierno federal la dependencia estima un gasto de 747 mil 631 mdp, 27 mil 715 mdp más que los 719 mil 915 mdp asignados hasta el cierre de 2024.
El planteamiento de política social de la futura Presidenta de mantener los actuales programas e incorporar nuevos, aumentar el número de beneficiarios y el monto de dinero a pensiones y becas implicaría gastar más de los ingresos que tendrá el sector público.
Sin reforma fiscal –que ya anunció no la habrá “por lo pronto”, las alternativas de allegarse recursos serían: la austeridad republicana–congelar salarios y plazas, y recortes presupuestales-, desaparecer los órganos autónomos y la deuda pública.
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