El estallido e incendio ocurrido en Tultepec, Estado de México, muestra lo vulnerable que es la sociedad ante una situación como esta, en la que la cultura de prevención sigue ausente, debe atenderse con urgencia y acciones precisas esta situación para generar una verdadera cultura de prevención y protección contra incendios a través de fortalecer el marco regulatorio y campañas informativas permanentes, aseguró el presidente de la Asociación Mexicana de Rociadores Automáticos Contra Incendios (AMRACI), Fausto López.
Dijo que los incendios son un problema latente objetivo y real en México, y mucha gente se supedita pensando que «que no nos va a suceder y que los elementos que actualmente exigen las normas oficiales mexicanas son suficientes, pero ahí están las tragedias registradas como la de ayer y que a pesar de que ya se tenía un antecedente, no se han realizado los cambios adecuados».
Recordó, así como se han logrado avances significativos en materia de protección civil ante sismos y huracanes. Pero es tiempo que las autoridades de los tres órdenes de gobierno atiendan la creciente incidencia de los incendios en México ya que estos son cada vez más frecuentes y destructivos; por lo que resulta impostergable crear una Ley de Seguridad Humana y Protección Contra Incendios.
Ello debido a que en México hasta ahora se ha trabajado más en el combate de incendios que en su prevención, y a ello se suma la existencia de un marco jurídico insuficiente acorde a los nuevos riesgos que enfrenta debido al crecimiento acelerado del país.
Dijo que aún cuando se cumpla con la Ley General de Protección Civil y la NOM-002-STPS-2010, al día de hoy, los lugares de concentración pública no están del todo protegidos de forma integral.
Estos incendios, destaca Fausto López, nos hacen reflexionar que de haber existido una cultura de prevención y una regulación específica, homologada e integral, podrían haber sido controlados en una etapa muy temprana.
Por ello hizo un llamado a las autoridades responsables de garantizar la seguridad de las personas y de los inmuebles a que juntos actualicemos y fortalezcamos el marco regulatorio para reducir el impacto social, económico y medioambiental que causan los incendios, y evitar las tragedias catastróficas y devastadoras causadas por estos siniestros.
Comentarios Cerrados