El “gorilazo” dado en Honduras al filo de las cinco de la mañana el domingo 28 de junio en Honduras, contra su presidente constitucional, Manuel Zelaya, instigado, según se dice, por los más acaudalados grupos de la oligarquía, es un funesto suceso que recuerda los tiempos de la “guerra fría” a mediados del siglo pasado.
Naciones de Hispanoamérica y El Caribe tuvimos, por ese concepto, una época que ensangrentó a los pueblos de naciones de Centro, Sudamérica y El Caribe, cuando por efectos del “reparto del mundo” en ese entonces, entre los EU y Rusia, eran puestos y depuestos gobiernos a conveniencia, de acuerdo a lo que hoy está de moda con. la detención del chinito Zenly Ye Gon: “coopelas o cuello”, dicho sea de paso.
Sería funesto para los destinos de las naciones hispanoamericanas y del Caribe que el cuartelazo dado en Honduras fuese la repetición de una nueva época que nos bañaría en en un mar de sangre y muerte, sin más motivo que la colocación de gobiernos afines a intereses extranjeros ahora en manos de la globalización económica neoliberal.
En base a las informaciones procedentes de Honduras, el “gorilazo” se produjo por instigación de los sectores más reaccionaros en lo económico y con la complacencia del sector más conservador del cedro político hondureño que advirtieron en el presidente Zelaya “un peligro para sus intereses”.
El establecimiento de una dictadura militar en Cuba, con el régimen de general Fulgencio Batista que gobernó autoritariamente a la Perla de las Antillas apoyados en las bayonetas de sus soldados, fue la causa del movimiento 26 de julio encabezado por Fidel Castro Ruz.
Los “gorilatos tuvieron expresiones trágicas en Argentina, con el general Rafael Videla, cuando se detenía, se torturaba y se daba muerte a los disidentes. Las “Madres de Mayo” que lloran la desaparición de sus hijos, son una muestra elocuente de aquellos trágicos tiempos alentados por la “guerra fría” URSS- EU.
En Paraguay, la dictadura militar del general Alfredo Stroessner, quien gobernó al país durante muchos años, con autoritarismo, es otro trágico ejemplo de lo acontecido por la presencia del totalitarismo alentado en aquellos tiempos previos al advenimiento formal del neoliberalismo tecnócrata sin sentido de justicia social.
Guatemala sufrió regímenes dictatoriales como el de Manuel Idígoras Fuentes, quien durante el régimen del Presidente Adolfo López Mateos, ametralló barcos pesqueros mexicanos y le declaró la guerra a nuestro país, en un acto de locura de ese excéntrico gobernante chapín.
Venezuela tuvo en Marcos Pérez Jiménez a su gorila dictador de mayor renombre, en la época de John F. Kennedy al frente de los destinos de los EU. Es ominoso lo que ha ocurrido en Honduras. Afortunadamente, después del cuartelazo de la Ciudadela el mes de febrero de 1913, que depuso al Presidente Francisco I. Madero y al vicepresidente José María Pino Suárez, no se ha presentado otra traición.
Por efectos de los “gorilatos” engendrados por la “guerra fría”, no solamente en Cuba surgieron guerrillas como la que encabezó Fidel Castro Ruz. En Brasil, el autoritarismo de los presidentes Juscelino Kubitschek, Janio Quadros, Joa Goulart, etc., motivó el surgimiento de la “guerrilla urbana”, uno de los principales exponentes, según los datos que tenemos a la manos, fue Marighela, con la participación intelectual de algunos curas de la “teología de la Liberación”, como Fray Betto.
En México, la guerrilla afloró y se desarrolló, a partir de los años 60 del siglo pasado, no precisamente por efectos directos de la “guerra fría” EU-URSS, sino como consecuencias dela “guerra sucia”contra los grupos insurgentes. Así hubo entre otros guerrilleros, Lucio Cabaña y Genaro Vázquez Rojas.
En la medida de intereses atribuidos a los EU, surgieron regímenes autoritarios como el de Augusto Pinochet, a quien se le descubrieron varias cuentas multimillonarias en dólares.. Pinochet es uno de los principales “gorilas”, por haber hundido en mares de sangre y muerte, a los habitantes de la hermana República de Chile.
El cuartelazo, “golpe de Estado”, “gorilato” o como se le quiera llamar ocurrido en Honduras, es un lamentable suceso que no cabe en América, donde se lucha arduamente por avanzar a través de los caminos de la democracia.
mmc.informacion@yahoo.com.mx
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