Adolfo Montiel Talonia
La policía en todo el mundo es vista como tenebrosa. Y así lo es. Bajo el misterio trabaja. Urgando en secreto y clandestinamente. En un crimen, pongámoslo de ejemplo, hay que recabar información de familiares del muerto. De las amistades y de los vecinos de hogar o del trabajo. El trabajo es misterioso. Pero hay países con gobiernos dictatoriales que ven a la policía como causante de delitos y de terror. En México se tiene, desde el gobierno actual en la mira a la policía política.
Resulta que parte del mundo se movilizó en marchas y luego en movimientos de guerillas. En las décadas de los 60-70s. México fue prolífico en movimientos guerrilleros. Con secuestros de políticos y de empresarios. Jóvenes quijotescos que creyeron que con terrorismo cambarían el mundo. Tras la represión del 68, aumentaron los guerrilleros. Secuestraron y mataron Garza Sada, Aranguren, son víctimas de la guerrilla. Y otras familias más. ¿Y la policía? cumplió con investigar.
Importante: Ahora la vieja y fracasada extrema izquierda pretende abrir un juicio a esa policía. Cuidado. Tiran al cielo las lanzas y en su caída revertir el daño. España es grande porque controló el odio y se impuso la razón.
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