Marzo 8, día internacional de la mujer
Un día. Un año… Debiera y debe ser una vida, todas las vidas, dedicadas a la mujer. La mujer, parte fundamental del ser humano. Hombre-mujer-hombre-mujer. No sería entendible, comprensible, otra forma. Es la unidad esencial a partir de la cual se construyen familia, comunidad, sociedad, estado.
Obligadas las reflexiones. ¿Cuál es la situación de la mujer en los ámbitos que componen nuestra realidad? El balance resultará negativo en la conciencia de quienes reconocen en ellas, la parte complementaria de cuanto somos. Para los cínicos, es asunto de cultura. Una cuestión en la que la mujer ocupa un lugar de destino. Desde el principio de las sociedades.
Hace algunas semanas, La Jornada publicó en portada: “De cada 10 puestos gerenciales, sólo 2 son ocupados por mujeres”. ¿Falta de capacidad? No, falta de oportunidades.
En 1945 se firmó el primer acuerdo internacional en defensa de la igualdad de ambos sexos, como derecho fundamental e indiscutible. 1975 fue instituido como “Año Internacional de la Mujer”. Después se estableció como Día Internacional de la Mujer el 8 de marzo.
En la fecha de la celebración, hubo voces coincidentes en la Cámara de Diputados:
Jorge Carlos Ramírez Marín, presidente de la Mesa Directiva, dijo: “Como Octavio Paz, creo que en el grado en que se respetan los derechos humanos, en el que hombres y mujeres son iguales en los pueblos, está su verdadero nivel de desarrollo. Por eso, no somos un país desarrollado. A veces ni siquiera un país en vías de desarrollo.
“La mujer ha estado demasiado tiempo en los discursos, poco en los presupuestos. Demasiado tiempo en las intenciones, poco en las reformas legales que la hagan efectivamente igual. Demasiado tiempo en voces libertarias que exigen igualdad de la mujer, poco en lo realizado considerando lo urgente que es sacar de la precariedad a la mayor parte de la población femenil mexicana, que vive en condiciones sumamente difíciles.
Rosi Orozco, valiente legisladora que aplica su mayor esfuerzo al combate a la trata de personas, en particular de mujeres, de niñas, dijo en la tribuna: “Este Día Internacional de la Mujer no sólo es una fecha propicia para festejar en México al sexo femenino, es un día en el cual las mexicanas y mexicanos debemos levantar nuestra voz y cambiar nuestros paradigmas. Qué mejor celebración para este día que combatir, desde nuestro entorno, los actos de violencia contra cualquier persona, en especial contra las mujeres, adolescentes, niñas. Combatir con cualquier medio a nuestro alcance la trata de personas.
Julio Saldaña Morán, diputado veracruzano expresó: “a pesar de los valiosos avances que en materia de igualdad de género ha alcanzado nuestra sociedad, sigue constituyéndose en un reto dotar a las mujeres, en condición de vulnerabilidad, de las herramientas necesarias y suficientes que posibiliten su acceso a mejores oportunidades de vida. La igualdad entre mujeres y hombres se logra cuando ambos tienen el mismo poder para ir construyendo la sociedad y sus propias vidas. Para ello se debe contar con las posibilidades, derechos y responsabilidades iguales en todas las áreas de la vida. Las mujeres no buscan la alternancia de roles sino compartir tareas y responsabilidades.
María Guadalupe García Almanza, diputada oaxaqueña manifestó: “Si realmente queremos lograr la transformación de nuestra sociedad es necesario dar a las mujeres el lugar que les corresponde en el proceso de transformación del país. Se debe auspiciar una política que conduzca a la integración de las mujeres en las tareas del desarrollo y de la vida nacional, en igualdad de oportunidades con los hombres”.
Bienvenidas las coincidencias en este tema fundamental apuntan a acuerdos legislativos en favor de las mujeres.
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