PEPE CAMARA
En apoyo a la ratificación del Acuerdo de París COP 21, la Cámara de Diputados avaló con 435 votos, el dictamen que reforma la fracción VII del artículo 33 y el inciso b) de la fracción II del artículo 34 de la Ley General de Cambio Climático, para establecer elementos enfocados a fortalecer la mitigación y reducción de emisiones.
El documento precisa que los objetivos de las políticas públicas para la mitigación son medir, reportar y verificar las emisiones, considerando, a través del enfoque de cuenca atmosférica, los valores de concentración permisibles respecto de la calidad del aire, con el objetivo de no rebasar su capacidad de asimilación.
Para reducir emisiones, las dependencias y entidades de la administración pública federal, estatales y municipales, promoverán el diseño, elaboración de políticas y acciones de mitigación asociadas a los sectores correspondientes, creando mecanismos para la sustitución progresiva del transporte que utiliza combustibles fósiles por eléctricos e híbridos.
Al fundamentar el dictamen, diputado César Augusto Rendón García (PAN), destacó que México es un país en desarrollo altamente vulnerable a los impactos negativos del cambio climático. Las emisiones de gases de efecto invernadero representan el 1.4 por ciento de las globales, y sus emisiones per cápita, que incluyen a todos los sectores, es de 5.9 toneladas de dióxido de carbono equivalente.
Con lo aprobado, la gestión y la política de cuidado de la atmósfera no se circunscriben en divisiones político-administrativas, sino a un área geográfica considerando las características meteorológicas, y aspectos poblacionales y topográficos.
De igual modo, se plantea la sustitución gradual del transporte público hacia otro más limpio, como el que utiliza energía eléctrica o híbrida.
Los posicionamientos de las fracciones parlamentarias fueron coincidentes: establecer un marco jurídico idóneo para que los tres órdenes de gobierno protejan la salud; la calidad del aire por cuenca atmosférica contribuirá a mantener una buena calidad del mismo a largo plazo; realizar mediciones de emisiones de gases de efecto invernadero en cuencas atmosféricas y no por zonas geográficas.
El enfoque de cuenca atmosférica no es solo un cambio cosmético, se sientan las bases para fincar un cambio de paradigma que lleve a la preservación del ambiente, y con ello, evitar la pérdida económica de 20 mil millones de pesos y 37 mil 488 muertes prematuras, calculadas para el 2018.
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